martes, 21 de febrero de 2017

En Tabasco es delito de ser padres de hijos que nacieron de vientres de alquiler

En el estado de Tabasco, una mujer llamada Rosalía y que ha sido madre gestante sustituta dijo: “Nos acusan de que vendemos niños, de que traficamos niños, y la verdad no lo hacemos con ese afán”. Por ello, el sistema DIF de Tabasco inició la persecusión contra mujeres que rentaron sus vientres para ser madres gestantes sustitutas. En el caso de Rosalía, personal del DIF la buscó en su casa y le dijo que cometió un delito. A través de un documento oficial, el DIF de Tabasco advierte a las madres gestantes sustitutas que inició una investigación en su contra por posibles hechos de carácter delictuoso, al ocultar la ubicación de los recién nacidos que parieron y que no han sido registrados, son bebés a quienes el Registro Civil de Tabasco se negó a dar identidad, al no expedirles el acta de nacimiento, además de que intentó quitárselos a sus padres biológicos. Rosalía, mujer de escasos recursos que rentó su útero el año pasado, dice que lo hizo para ayudar a una pareja extranjera y el dinero que le pagaron fue para apoyar a su familia. Por ese hecho le abrieron una investigación. “De parte de ciertas autoridades de Tabasco recibo malos tratos e incluso una persona me dijo que lo que yo estaba haciendo era tráfico de menor, que estaba yo vendiendo al niño y que con ella yo no tenía que fingir nada”, explica Rosalía. La intimidación se extiende a los padres biológicos de esos bebés. Marco y Luciana son un matrimonio argentino que durante una semana se escondió en la habitación de un hotel, ante el temor de que el gobierno de Tabasco les quitara a su bebé. Ellos tienen una hija de 9 años, querían tener un segundo hijo, pero Luciana ya no pudo embarazarse. En Tabasco, donde la maternidad subrogada estaba permitida hasta enero del 2016, vieron la opción de tener otro hijo biológico a través de una madre gestante sustituta. En 2015 viajaron a Villahermosa para firmar el contrato. El 30 de noviembre de 2016 nació su hijo y después de casi 3 meses, el gobierno del estado se niega a expedir el acta de nacimiento de su bebé. “El tiene derecho a tener su acta. Yo no hice nada malo, tengo todo, tengo mi contrato, ADN, todos los papeles que nos pidieron, es mi hijo”, señala Luciana, madre contratante argentina. “Estamos presos, por qué, no lo sé, por tener un hijo, no lo entendemos”. El 14 de enero de 2016 entró en vigor una reforma al Código Civil de Tabasco, que impide a extranjeros venir a tener hijos a través de una madre gestante sustituta. Según el gobierno tabasqueño, todos los niños nacidos después de la reforma lo hicieron en la ilegalidad. Marco y Luciana aseguran que el contrato de subrogación lo firmaron antes de que entrara en vigor la reforma al Código Civil. “Mi bebé no tiene nacionalidad, no tiene apellido, no tiene nombre, no tiene nada. Legalmente no existe”, explica Marco, padre contratante argentino. En enero pasado, el coordinador de Asuntos Jurídicos del gobierno de Tabasco, Juan José Peralta Fócil, aseguró que no van a entregar actas de nacimiento a extranjeros que tuvieron hijos con una madre de alquiler porque estarían violando la ley. Días después, el gobierno de Tabasco se contradijo y reconoció que sí puede expedir el documento. El 30 de enero pasado, el Registro Civil del Estado entregó las actas de nacimiento de sus respectivos hijos a dos parejas de nacionalidad israelí, y el 11 de febrero, un ciudadano italiano finalmente obtuvo las actas de sus gemelos. Los padres de los bebés que no han recibido el acta de nacimiento de sus hijos acusan de discriminación al gobierno del perredista Arturo Nuñez. “Fuimos a preguntar por qué ellos sí y nosotros no”, dice Marco, padre argentino. “El gobierno nos trata como criminales pero no he hecho nada de malo, este bebé es mi sangre. Los primeros días, cuando tuve a mi bebé, lloraba casi cada día, lágrimas de felicidad”, afirma Thierry, padre contratante francés. Más de 20 bebés se encuentran sin identidad en Tabasco. Los padres de esos niños llevan más de dos meses varados en esa entidad, están a punto de perder su trabajo en su país y tienen miedo de la advertencia del gobierno estatal de que les va a quitar a los niños para llevarlos al DIF y ponerlos en adopción. El gobierno de Tabasco se negó a dar entrevista.

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