Cuatro niños con cáncer murieron en el Instituto Estatal de Cancerología de Guerrero en agosto del 2016, lo que representó una cifra inusual, según las estadísticas oficiales del Instituto.
El mes de la muerte de estos niños coincide con la alerta que hicieron por escrito dos oncólogos de ese hospital, debido al cambio de laboratorio que surtía las quimioterapias y que las nuevas no estaban haciendo efecto a los pacientes.
Ana Bertha Rivera Ramírez, jefa de Oncopediatría del Instituto Estatal de Cancerología de Guerrero, explicó: “En ese entonces sí tuvimos el riesgo y se hizo ese comunicado a la Dirección. Cuando yo hice ese escrito, yo vi que mis pacientes, mis 4 pacientes, la médula ósea no producía. Algo estaba pasando”.
En marzo pasado, se expuso la denuncia de la familia de Carlos Mateo Zúñiga Camargo, quien murió a los 7 meses de edad, una semana después de que le aplicaron la quimioterapia Methotrexate del Laboratorio Columbia, en el Instituto de Canceroloía de Guerrero.
“Ellos proporcionan copia del expediente clínico, alterado. La hoja donde señala la quimioterapia que recibió y el laboratorio que correspondía la extraen. El número de fojas no corresponde”, dice Heidi Camargo, madre de menor fallecido en Cancerología de Guerrero.
En su expediente clínico quedó registrado que el 12 de agosto del 2016 se le administró el mismo medicamento que fue cuestionado en un documento oficial por la jefa de Oncopediatría.
Álvaro Pérez Vega, comisionado de Operación Sanitaria de Cofepris, señaló: “Al hacer la investigación, la propia doctora que generó este formato nos indica que (…) había visto que el medicamento del Laboratorio Columbia estaba en piso. nunca asegura que se haya suministrado”.
La quimioterapia cuestionada, Methotrexate del Laboratorio Columbia, no cuenta con registro de Cofepris desde septiembre del 2015.
El 9 de marzo de este año, ante una solicitud de transparencia, la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios respondió en un oficio que esa quimioterapia no tenía registro.
Cuatro días después cambió la versión. En otro oficio en el cual indicó que hicieron una nueva revisión, esta vez exhaustiva, mencionaron que el registro de esa quimioterapia está en proceso de renovación.
El comisionado de Operación Sanitaria de Cofepris, Álvaro Pérez, justificó el cambio de versión y lo atribuyó a un error al escribir el nombre del medicamento.
“Dice methotrexate con th, de Laboratorio Columbia. Aquí la respuesta no tenía que haber sido: no hay, sino más bien decir, aclárame a que sustancia activa te refieres”, señala Álvaro Pérez Vega, comisionado de Fomento Sanitario de Cofepris.
La quimioterapia cuestionada lleva año y medio en espera de que le renueven el registro en presentación de ampolleta, porque la misma sustancia, pero en tableta tiene el registro cancelado.
El 17 de febrero pasado, la Secretaría de Salud de Guerrero realizó una inspección sanitaria en el Instituto de Cancerología de Guerrero, esto es, 6 meses después de la muerte del niño Carlos Mateo Zúñiga.
El documento emitido señala que, en agosto del 2016, mes en que falleció Carlos Mateo, murieron otros tres menores a quienes también se les aplicó presuntamente Methotrexate.
Una cifra inusual, ya que el promedio de decesos es uno por mes, según el entonces director del Instituto de Cancerología de Guerrero.
“El año pasado tuvimos 12 decesos. Hablamos de uno por mes”, indica Jorge Eblem Azar, director del Instituto Estatal de Cancerología de Guerrero.
La inspección sanitaria que hizo la Subsecretaría de Regulación Sanitaria de Guerrero, el pasado 17 de febrero, también detectó irregularidades en la farmacia del Instituto de Cancerología. entre ellas:
1) No presentó constancia de fumigación actualizada.
2) Los libros de medicamentos controlados no cuentan con la firma del responsable sanitario desde 2015.
Aún como director del Instituto de Cancerología de Guerrero, Jorge Eblem Azar, negó que haya habido irregularidades en el cambio de medicamentos, a pesar de la muerte de cuatro niños en agosto del 2016 y la alerta emitida por dos oncólogos.
No obstante, reconoció que tuvieron que dejar de aplicar las quimioterapias de los laboratorios cuestionados.
En mayo pasado, Jorge Eblem Azar, renunció a la dirección del Instituto Estatal de Cancerología de Guerrero, sin que haya resuelto el caso del niño Carlos Mateo Zúñiga.
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