Hipólito Mora, dispuesto a tomar las armas si desaparece la Fuerza Rural

Ignacio Roque Madriz en Morelia | Hipólito Mora, fundador de las autodefensas de La Ruana, Michoacán, reafirmó ayer que desea mantenerse dentro de la Fuerza Rural Estatal, y señaló que si esta corporación desapareciera, estaría dispuesto a tomar nuevamente las armas. “Si llegara a acabar esto de la Fuerza Rural, si se necesita, estoy dispuesto a tomar las armas; ya lo hice una vez, ¿por qué no lo haría otra vez? Ojalá que no se necesite”, dijo. Señaló, asimismo, que la agresión a integrantes de su grupo, en la cual murió su hijo Manuel, no fue provocada por la Gendarmería, sino por Luis Antonio Torres, Simón El Americano, de quien comentó además que desconoce los motivos que lo llevaron a disparar contra su gente. “Es falso. La Gendarmería estaba al lado de nosotros. Hizo lo que deben hacer ellos, tratar de evitar que pasara algo grave; igualmente, nosotros”, indicó. En declaraciones radiofónicas y a reporteros en la casa donde se encontraba velando a su hijo, Mora dijo que su intención es seguir adelante con sus ideales, mismos que ahora “están más sólidos que nunca, con la pérdida de mi hijo”. Agregó: “A pesar de que estoy muy golpeado, me siento más fuerte”. El fundador de los grupos de autodefensa en La Ruana narró que su esposa, entre llanto, le dijo: “Yo no quería que hicieras esto, ya lo hiciste, te admiro, me siento orgullosa de lo que has hecho, y ahora te voy a pedir que le eches más ganas que nunca, que sigas adelante, que sigas luchando por la gente que lo necesita”. Refirió que cuando las autoridades intentaron hacerle la prueba de radizonato para determinar si disparó su arma en la refriega con el grupo de Antonio Torres, él les indicó: “Les evito que la hagan, yo sí disparé”. Luego dijo que cuando surgió la Fuerza Rural Estatal el gobierno no le dio el un rifle simplemente para traerlo en la mano, sino “para hacer el bien, para defenderme”. Y en este orden de ideas, abundó: “Disparé; pero disparé para defenderme. Estoy seguro que no le pegué a nadie, pero de que disparé sí lo hice, siempre he aceptado las cosas como son, no me gusta nada con mentiras; la verdad, aunque me afecte a mí mismo”. A decir del ex autodefensa el grupo de El Americano, era de entre 300 y 400 personas, y el suyo de alrededor de 40. Y al reiterar que desconoce los motivos del ataque, comentó que las rencillas que pudiera haber habido entre él y Torres por la toma de ranchos limoneros quedaron atrás, ya que los predios fueron entregados. Lo que existe –dijo— es un problema de seguridad en inmediaciones de La Ruana, debido a que hay laboratorios clandestinos de metanfetaminas.