• En la cuarta mesa de diálogo se abordó el “Marco
convencional de la jornada laboral y modelo de reducción en otros países”
Este lunes se realizó el cuarto foro de Parlamento Abierto
para analizar la iniciativa que reduce la jornada laboral de 48 a 40 horas por
semana, donde representantes sindicales y patronales abordaron el “Marco
convencional de la jornada laboral y modelo de reducción en otros países”.
El Diputado Manuel de Jesús Baldenebro Arredondo (MORENA),
presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, aseguró que es justa
la reducción de la jornada laboral, pues en esta administración se han
modificado el salario, las vacaciones y los esquemas de subcontratación.
Indicó que los empresarios son quienes conocen la empresa,
pero muchos diputados son trabajadores y es precisamente el trabajador quien
debe ayudar a convencer sobre la urgencia de realizar esta reforma; no
obstante, también los empleadores pueden presentar un proyecto.
La Diputada Susana Prieto Terrazas (MORENA), promotora de la
iniciativa, subrayó que es falso que se haya eliminado el modelo de
subcontratación, pues existen tres mil 500 quejas en la Secretaría del Trabajo
y Previsión Social (STPS) en contra de empresas que siguen contratando bajo
este esquema.
Refirió que esta Legislatura logró aumentar el periodo
vacacional y los salarios de los trabajadores “que duraron 36 años con un
aumento diario de dos pesos, porque la Comisión Nacional de Salarios Mínimos
establece los mínimos, pero no paga los máximos. Por eso no tienen los dos
millones y medio de trabajadores que requieren en la formalidad, porque no
quieren pagar mejor”.
El Diputado Santiago Torreblanca Engell (PAN) destacó que
todos los países que han implementado este esquema laboral pasaron por un
proceso de gradualidad y flexibilidad para no rebasar esas 40 horas de trabajo;
lo importante es determinar cómo insertarlo en México sin afectar la producción
y la pérdida del empleo formal.
No se trata sólo de tener trabajo, dijo, sino que sea
formal, porque de nada sirve que haya ocupación informal, mal pagada y sin
seguridad social, para después decir que el desempleo en México es de los más
bajos del mundo con el tres por ciento, “pero habría que ver bajo qué
condiciones”.
El Diputado Sergio Barrera Sepúlveda (MC) señaló que este es
un tema de gran trascendencia para mejorar la vida de las y los trabajadores
mexicanos. Añadió que se necesita generar un diálogo, incluso, con empleados de
determinados ramos, para saber qué mejorará con la reforma, encontrar
coincidencias y analizar la flexibilidad y gradualidad que se requiere para su
implementación.
Se debe, dijo, conocer el rol que tendrá el Ejecutivo
Federal en este tema para incentivar la formalidad y “dependiendo de ello se
verá el beneficio o afectación, pues México padece una informalidad muy
grande”.
De igual forma, el Diputado Tereso Medina Ramírez (PRI),
integrante del Grupo de Trabajo para la realización de estos foros, consideró
que es necesario dar este paso histórico en favor de la clase trabajadora del
país, pero el tema es cómo avanzar en su aplicación.
Subrayó que no se puede pensar en mejorar la productividad
con la misma jornada de 48 horas y sin poder dar el salto hacia adelante,
además, aún hay una deuda social con los trabajadores para mejorar los
salarios, la seguridad social y el sistema de salud.
Participación de ponentes
El Director del Centro de la OCDE para América Latina, Mario
López Roldán, señaló que éste es un tema central para el desarrollo económico y
social de los países y consideró que la reforma es oportuna, gradual e
incluyente, porque tiene grandes beneficios en materia de productividad,
competitividad, salud, reducción de desigualdades y bienestar.
Indicó que, entre los países de esta organización, México
tiene el peor balance entre vida y trabajo, pues es donde los trabajadores
tienen menos tiempo para el esparcimiento, el cuidado personal y “donde hay más
trabajadores pobres de tiempo”; además, tienen cinco años menos de vida en
promedio, la salud mental ha tenido un deterioro significativo por el
incremento de casos de ansiedad y depresión.
Ángel Evaristo Celorio Guevara, Coordinador jurídico del
Comité Nacional de la CTM, dijo que, si se logra esta reforma, obligará a
revisar los salarios, pues su alcance puede orillar al trabajador a tener menos
horas de trabajo o a caer en la informalidad, dando al “traste” con la reforma.
No obstante, la reducción de la jornada de trabajo, ya sea con dos días de
descanso a la semana o con reducción de la jornada diaria, traerá grandes
beneficios para los trabajadores, para sus familias, las empresas y para el
país.
Mylene Cano de la Fuente, gerente de Asuntos Económicos de
la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), afirmó que el
diálogo social, con la participación del sector obrero, patronal y el gobierno,
es el espacio adecuado para realizar las modificaciones a la jornada laboral.
“Solo a través de ello y con mesas de trabajo por sector, se podrán dimensionar
los impactos potenciales y formas de contención para una reforma de esta
magnitud”.
Carlos Hugo Morales Morales, Secretario general del Sindicato
de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM),
manifestó su respaldo a la iniciativa y llamó a que se unifiquen en los
términos planteados, tanto en lo privado como en lo público. Dijo que para no
provocar efectos adversos se deben observar los parámetros de la Recomendación
116 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y, en su caso, solicitar
asistencia técnica al organismo.
Tomás Héctor Natividad Sánchez, miembro de la Comisión
Laboral del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), exhortó a considerar un
proceso progresivo y gradual que analice un panorama completo, con impuestos,
costos de empleo formal, precio del tiempo de horas extras, competitividad y
productividad, pues su impacto no será igual en las diferentes áreas. “Si le
metemos más costos a la economía formal terminará creciendo la informalidad”.
Patricio Flores Sandoval, Secretario general del Comité
Ejecutivo Nacional del Sindicato Industrial de Trabajadores y Artistas de
Televisión y Radio, se pronunció por reducir el horario laboral, ya
que en la actualidad hay elevados niveles de estrés y una
jornada de 40 horas generará más productividad y una mejor convivencia social.
Destacó la importancia de abordar estos temas en mesas de trabajo con los
legisladores, quienes, “en términos reales y de conciencia, ya debieron haber aprobado
una reforma como ésta”.
Erika Quevedo, Directora general del Consejo de Empresas
Globales, aseguró que una reforma como ésta requiere una reflexión profunda con
ramas y sectores de la industria sobre el límite de horas laborales, de horas
extras permitidas y sobre sistemas de jornadas especiales. Asimismo, se tienen
que diseñar los incentivos correctos para el sector patronal que estimulen la
inversión y promuevan la creación de empleos formales.
Octavio Benavides Narro, representante patronal ante la
Comisión Nacional de Salarios Mínimos, manifestó que esta iniciativa impactará
a los empleadores y trabajadores mexicanos en muchos frentes, por lo que se
tiene que ver desde una óptica global y con base en un análisis de diálogo
social de corresponsabilidad de empresas, sindicatos y gobierno.