• Subraya el consejero presidente del INE que no es necesaria una reforma electoral; sin embargo, si se realiza debe aprobarse con el mayor consenso posible.
• Para el ejercicio de revocación de mandato se requiere expedir la respectiva ley, apunta.
Por Mario Ruiz Hernández
VALLE DE MÉXICO., a 29 de junio del 2021.- El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, afirmó que la consulta popular que se llevará a cabo el próximo 1 de agosto va a ser “exitosa” y será “el mejor ejercicio de participación ciudadana” en la historia del país; el instituto le va a cumplir a la ciudadanía a pesar de los intentos de descalificación.
En una rueda de prensa en el Palacio Legislativo de San Lázaro, posterior a la entrega de expedientes de las y los diputados federales por el principio de mayoría relativa a la LXV Legislatura en la Cámara de Diputados, el consejero detalló que la convocatoria entrará en vigor a partir del 15 de julio de 2021, conforme a lo establecido por el Congreso de la Unión, y se instalarán cerca de 57 mil mesas receptoras.
“La consulta debe ser una fiesta democrática, es la primera vez que vamos a tener una consulta en serio en este país, y ojalá no sea vista por algunos actores políticos como un pretexto para deslegitimar a la institución que más confianza tiene de parte de la ciudadanía, que es el INE”, aseveró.
Lamentó que no se puedan instalar más mesas de votación, y recordó que, en su momento, se señaló a la Presidencia de la República y a la Cámara de Diputados la necesidad de contar con los recursos necesarios; “originalmente queríamos instalar 104 mil mesas de votación, pero dado que no se nos proveyeron los recursos, por las instancias que fueron convocantes y promoventes de esta consulta, pues tuvimos que racionalizar el punto”.
Córdova Vianello destacó que gracias a una serie de previsiones y de políticas de austeridad “importantísimas” se generaron recursos, ahorros, que en lugar de entregarse a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), como siempre ha ocurrido, se van a destinar a la consulta.
“Con esos recursos, el INE va a poder cumplirle a la sociedad mexicana, pero lamentablemente podremos instalar no más de 57 mil casillas. Sin embargo, ningún ejercicio de consulta o similares, legales o realizados o extralegales, ha tenido tantos centros de votación, ni tendrá todas las garantías como va a tener la Consulta Popular del 1 de agosto”, apuntó.
Expuso que se convoca a las y los ciudadanos que fueron funcionarios de casilla en las mesas receptoras del voto el 6 de junio para que puedan acompañar dicho ejercicio democrático.
Externó su confianza porque este mecanismo de democracia directa, que es complementario a los de democracia representativa, en el futuro pueda realizarse con las mejores condiciones y se ajusten las reglas.
Abundó que la respuesta ciudadana para participar en este ejercicio “ha sido favorable”; sin embargo, se ha presentado un porcentaje de negativas.
“La respuesta hasta ahora ha sido positiva, estamos encontrando sí muchos rechazos, hay gente que dice ‘yo en la elección sí participo, pero en esto no participo’, bueno, pero eso es cada quien, la participación en este sentido es voluntaria, no es obligatoria, pero estamos teniendo una buena respuesta, tenemos tiempo, así que vamos a instalar todas las casillas debidamente en su momento”, dijo.
Consultado sobre si los “Servidores de la Nación” pueden fungir como observadores, sostuvo que “si quieren inscribirse pueden hacerlo, nada más que hay reglas; un funcionario público no puede ser observador electoral”.
Por otro lado, sobre la revocación de mandato, el consejero presidente señaló que sería óptimo expedir una ley en la materia, ya que no basta con lo establecido en las recientes reformas constitucionales.
Cuestionado respecto de una posible reforma electoral, aseveró que no hay necesidad de ésta, y quedó demostrado con las elecciones extraordinarias el 6 de junio pasado. Se dio constancia de la robustez del sistema electoral.
“Siempre es pertinente revisar las reglas y eventualmente hacer modificaciones en las mismas para enfrentar los distintos desafíos; pero una reforma electoral, quiero que quede claro, no es indispensable, pero siempre será pertinente. Los resultados hablan por sí mismos y el reconocimiento internacional es evidencia de lo que estoy diciendo”, subrayó.
Advirtió que hay que tener cuidado al hacer una reforma electoral, porque si algo ya funciona “a lo mejor lo descomponen”. No obstante, de realizar algún cambio debe hacerse con el mayor consenso de todas las fuerzas políticas.
Córdova Vianello también refirió que el pasado 6 de junio se vivió un proceso electoral exitoso, pese a la descalificación sistemática en contra de la institución.
Destacó que en los informes de observación electoral internacional todos coinciden en celebrar tres cosas: una, la altitud de miras de la sociedad mexicana; dos, la fortaleza de nuestro sistema electoral; y tres, la pertinencia de las medidas sanitarias que se tomaron.
Aseveró que “no hay ninguna evidencia que la elección haya alterado la evolución de la curva de contagio del Covid-19, las elecciones no interfirieron”.