Mambo Café Insurgentes volvió a latir con esa energía que sólo la cumbia puede provocar cuando se mezcla con honestidad, identidad y un sueño que comienza a tomar forma. Huatulco Beach presentó oficialmente su sencillo “Orgullo” ante decenas de medios convocados a una rueda de prensa que pronto se transformó en un showcase íntimo y emotivo, donde la agrupación confirmó que llega para reclamar un espacio genuino en el mapa de la cumbia mexicana contemporánea. Creado por el compositor hidalguense Ricardo Sánchez Torres, el proyecto apareció sobre el escenario con una fuerza que no viene del ruido, sino de la convicción: la de abrir caminos nuevos sin romper los que ya existen, la de honrar el ritmo que creció en barrios, ferias, salones y costas, pero que siempre encuentra maneras de reinventarse sin perder su esencia.
Para Ricardo, cuyo temperamento creativo se percibe en cada gesto y cada palabra, este proyecto es más que un lanzamiento discográfico. Es un acto de memoria emocional. “Orgullo nació de una historia familiar; es una herida que aprendí a convertir en música”, explicó frente a la prensa, subrayando que el tema retrata esa distancia que provocan el carácter, la terquedad y el silencio en los amores que alguna vez fueron refugio. Su voz, firme pero cálida, dejó claro que este primer sencillo no es sólo una carta de presentación: es un manifiesto. “La cumbia también puede contar lo que duele, lo que pesa y lo que uno no se atreve a decir. La intención es que la gente se escuche en la canción.”
Huatulco Beach debe su nombre a un imaginario de sol, fiesta y agua, pero también a una profundidad simbólica que se quiso rescatar desde una raíz ancestral. La leyenda del “lugar donde se venera al madero” se convierte así en metáfora de resistencia, permanencia y celebración, una tríada que atraviesa todo el proyecto. Con esa visión, Ricardo reunió a tres intérpretes cuyas historias musicales convergieron con una naturalidad sorprendente. Héctor Hernández, con ocho años de experiencia en Los Ángeles Azules, aporta un tono experimentado, acostumbrado a escenarios inmensos y también a los rincones donde la cumbia se canta con la respiración cortada. Marvin Sen, cantante y trompetista guatemalteco, suma intensidad creativa y un instinto melódico que avanza sin miedo. Su, originaria de Ecatepec, irrumpe con una presencia escénica vibrante, influencias que cruzan el regional y el rock, y una emocionalidad que se vuelve un hilo conductor entre el público y la banda.
Durante la presentación, quedó claro que “Orgullo” no sólo presenta a la agrupación, sino también al sello discográfico recién nacido: Zigma Records 7777, una apuesta firme por producciones cuidadas, artistas emergentes y un catálogo que quiere ampliar el panorama tropical con propuestas frescas y auténticas. Ricardo lo dijo con claridad: “Zigma nace para hacer las cosas bien, sin prisa, sin atajos; queremos proyectos que cuenten historias y respeten su sonido.” La prensa aplaudió este gesto de independencia musical, poco común en una escena donde las producciones rápidas suelen imponerse sobre la narrativa.
El showcase —íntimo, cálido, lleno de color— mostró lo que la agrupación promete en vivo: una energía que se enciende desde el primer acorde, voces que dialogan en armonía y un ritmo que abraza al público sin necesidad de estridencias. La cumbia, en manos de Huatulco Beach, se siente nueva sin dejar de ser cumbia; se vuelve espejo emocional, puente generacional y una invitación a bailar desde la verdad.
“Orgullo” ha iniciado su vuelo, y lo hace desde un escenario que vibra con historia musical como es la del Mambo Café. Huatulco Beach demostró ayer que llega con disciplina, pasión y un entendimiento profundo de lo que significa entrar al mundo tropical por la puerta grande: no imitando, sino proponiendo; no repitiendo, sino dialogando con lo que ya existe. Ayer, en el Mambo Café, la cumbia mexicana sumó un nuevo capítulo, uno que promete expandirse con fuerza en los meses que vienen. Y si algo quedó claro es que este proyecto quiere caminar de frente, con raíz firme y corazón dispuesto.
