"Revelarán" acervo del Consejo Mexicano de Fotografía a través de "lentes solidarios"

LA CRÓNICA La famosa fotografía del Che Guevara tomada por Alberto Korda, los guerrilleros de Guatemala captados por la lente de Pedro Valtierra o los rostros de niñas que congeló Mariana Yampolsky, forman parte de las siete mil impresiones y 500 negativos del Consejo Mexicano de Fotografía, uno de los acervos más importantes de la segunda mitad del siglo XX que resguarda el Centro de la Imagen y del cual se desprenderá en octubre la exposición América. Lente solidaria.

Con un total de 118 imágenes, hemerografía y algunos libros, esta muestra podrá visitarse en el Centro Cultural Tlatelolco y, de acuerdo con Itala Schmelz, directora del Centro de la Imagen, formará parte de la oferta de Foto.Mx (antes llamado Fotoseptiembre). “Es la primera vez que, después de 20 años, haremos una exposición abierta con los fondos del Centro de la Imagen; se presentará en Tlatelolco en el memorial del 68 y será una exposición que curará Ariel Arnal sobre los movimientos sociales en Latinoamérica, tema bien cubierto por el archivo”, indica a Crónica, Schmelz. La muestra, añade, versará sobre la foto latinoamericana social y política de la década de los 70 y principios de los 80, periodo en que la palabra solidaridad fue traducida como fotografía militante, de denuncia, documental y artística. Sobre las publicaciones que acompañarán la exposición, comenta, serán memorias del I y II Coloquio Latinoamericano que servirán para evidenciar la comunicación que hubo entre los fotógrafos de esa época. “Estamos hablando de fotógrafos de Argentina, Brasil, Colombia, Cuba; de mirar este periodo tan conocido en México a la par de la versión latinoamericana. Lo que me gusta de esta curaduría no es tanto la cuestión del conflicto, sino todo lo contrario, ya que el curador quiere destacar cómo estos movimientos generaron solidaridad entre la gente”, precisa Itala Schmelz. Con América. Lente solidaria, aclara la funcionaria, se dará a conocer parte del archivo del Consejo Mexicano de Fotografía, actualmente en proceso de conservación y que reúne no sólo a autores reconocidos como Alberto Korda, Pedro Meyer o Mariana Yampolsky, sino a fotógrafos poco afamados de Alemania, Uruguay, España, Chile, Lituania, Perú, Puerto Rico y Guatemala. Itala Schmelz también externa que el pasado 24 de abril concluyó jurídicamente el proceso de donación de este acervo compuesto por 7,246 imágenes, 572 negativos, 231 impresiones de prensa, 275 videos y 10 litografías hechas de 1978 a 2000.

“Cuando nace el Centro de la Imagen, el Consejo Mexicano de Fotografía (CMF) decide donar sus archivos y eso es importante porque el Centro de la Imagen nace junto con un fondo fotográfico que le da una misión particular, se concibe como un espacio de conservación, en paralelo con un espacio de formación, educación y exhibición”, detalla. —¿Qué trabajos de conservación realizan con el fondo del Consejo Mexicano de Fotografía? —Independientemente de que se logró formalizar la donación, llevamos varios años en la labor de conservación, diagnóstico y catalogación. Ximena Bruna, nuestra especialista en archivos, lleva tres años revisando el material y estamos cerrando una primera etapa de diagnóstico, el siguiente propósito es la conservación y escaneo. DE LA REVOLUCIÓN A LA VANGUARDIA. Los jueves de 1976, a partir de las nueve de la noche, fotógrafos mexicanos como Aníbal Angulo, Lázaro Blanco y Pedro Meyer se reunían en el estudio de éste último o en la Casa del Lago para discutir cómo la fotografía podría tener mayor visibilidad. Con esas reuniones e inquietud nació el Consejo Mexicano de Fotografía, el cual funcionó de 1978 al 2000. ¿Quiénes fueron miembros del CMF? La lista es larga: Yolanda Andrade, Geraldo de Barros, Cornell Capa, Gilberto Chen, Marco Antonio Cruz, Sara Facio, Mario García Joya (mayito), Paolo Gasparini, María Eugenia Haya, Graciela Iturbide, Alberto Korda, Camilo Luzuriaga, Pedro Meyer, José Luis Neyra, Evandro Teixeira… “El Consejo Mexicano de Fotografía es la colección más importante del Centro de la Imagen, es el corpus más homogéneo, de mejor calidad y muy representativo de una época de México y Latinoamérica”, señala Ximena Bruna, encargada del archivo. Durante un recorrido por el acervo, la especialista comenta a Crónica que existen muchos temas dentro de las imágenes, el evidente es el social-político pero también hay otros como la religión, el erotismo, el retrato indígena o la imagen experimental. “Por ejemplo, Cuba tiene mucho material de obreros pero no está enlazado con los movimientos sociales porque sólo es el retrato del obrero, de sus manos, de la tierra. El acervo del CMF también puede dividirse en fotografía de vanguardia, hay mucho paisaje surrealista, como el fotografiado por los peruanos en los años 60 pues es una mezcla de paisaje y fotomontajes”, señala Bruna. Otra temática es la Revolución Cubana que fotografió Alberto Korda, Marucha (María Eugenia Haya) y Mayito (Mario García Joya), pero el país con mayor diversidad gráfica es México, de quien sobresalen fotos de vanguardia, al igual que Colombia y Brasil, siendo ésta última nación de quien el Centro de la Imagen conserva las impresiones más antiguas ya que datan de los años 40, hechas por Geraldo de Barros y Germán Lorca. Ximena Bruna precisa que el CMF estuvo formado por fotógrafos de diversos países de América Latina pero también por expertos de Europa como Alemania, España y Lituania, aunque en números de producción –indica– México predominó ya que el actual acervo resguarda imágenes en un 75 por ciento de autores nacionales. “El país con la colección más grande dentro del CMF es México, tiene más de 3 mil fotografías, después sigue Cuba, Brasil y Argentina y, a la vez, son los países con mejor calidad fotográfica no sólo estética, sino de positivos bien hechos. Alemania también tiene una excelente calidad aunque su corpus es pequeño, pero tiene un buen revelado, el papel no tiene proceso de acidificación, a diferencia de Cuba”, explica. —¿Existe una catalogación del acervo del CMF? —En la parte archivística ya está todo inventariado, está terminado el primer paso de catalogación básica: técnicas fotográficas, información del autor e información del historial de exposición.

—¿Cuáles son las técnicas fotográficas que predominan? —El Consejo Mexicano de Fotografía en un 80 por ciento, trabajó plata gelatina en blanco y negro; un 15 por ciento es fotografía cromogénica; hay un cuatro por ciento que pueden ser técnicas mixtas como las hechas por Felipe Ehrenberg; manipulación de fotocopia, fotocopia-collage-foto y foto intervenida con papeles y pintura, como fue el trabajo de Aníbal Angulo. La encargada del acervo también señala que a pesar de la buena calidad estética que predomina en las imágenes del siglo pasado, existen impresiones malas. “Hubo patitos feos en el Consejo, pero eso también es parte de la riqueza del acervo porque habla del movimiento de ese momento y de mucha gente que dejó de hacer fotografía. Además, tenemos material desconocido, alrededor de 20 obras que no sabemos de qué autores son ni de qué países provienen”. —¿De qué fotógrafos mexicanos tiene más material? —Lázaro Blanco, Enrique Bostelmann, Pedro Meyer, Pedro Valtierra, Aníbal Angulo y Laura González. CONSERVACIÓN. Las fotografías que conforman el acervo del Consejo Mexicano de Fotografía únicamente se han expuesto en dos ocasiones, la primera muestra sucedió en 1986 bajo el título Democracia vigilada y la segunda vez, fue en 2007 con la exposición Revelación, revuelta y ficción, por lo que en su mayoría, el material gráfico es inédito o poco conocido. La imagen más vista y solicitada de este acervo es el icónico rostro del Che Guevara con la mirada hacia arriba y portando su emblemática boina, que retrató Alberto Korda, sin embargo, es la que se encuentra en peor estado de conservación. De acuerdo con Ximena Bruna, es la fotografía más famosa y de la cual se cuentan con dos impresiones con dedicatoria de Korda a Pedro Meyer, aunque, dice, existe la leyenda o mito a voces de que hubo una tercera impresión, la cual ya no se encuentra en el archivo. Sobre los fotógrafos poco mencionados del CMF y por ende, que tienen imágenes desconocidas, sobresalen los expertos alemanes. “Sus materiales de buena calidad estética, buenos revelados, buenos papeles. En el Consejo Mexicano los fotógrafos que no siguieron ejerciendo la profesión y que son desconocidos, tienen mal material. En Europa hay muchos desconocidos pero que son buenos como el francés Fréderic Brenner o el italiano Paolo Gasparini”. Ximena Bruna señala que contrario de lo que se pensaría, el estado de conservación de las imágenes del CMF, en general es bueno, aspecto importante ya que a pesar de no tener la noción actual de preservación, contienen soportes a favor de la permanencia de las imágenes. “Tuvieron la capacidad en el momento de comparar papel libre de ácido con reservas alcalinas, lo cual es impresionante porque en los años 60 y 70 ellos ya estaban previendo el estado de conservación, claro que tenemos soportes fatales y el gran problema del Consejo son los montajes, indica. La experta comenta que en ese tiempo no existía la conservación preventiva, movimiento que surge aproximadamente en los años 50 en Estados Unidos y que 30 años después, llegó a México, por lo que varios fotógrafos no tuvieron buena capacidad para hacer montajes no invasivos. —¿Restaurarán próximamente alguna fotografía del acervo? —He trabajado los últimos tres años en el diagnóstico del fondo del Consejo Mexicano de Fotografía. Nunca se ha intervenido alguna impresión, sólo he quitado de forma urgente algunas etiquetas o cosas muy puntuales, pero no he intervenido una imagen, aunque la idea es que pronto se pueda hacer.