Construyendo la flota naval

LA CRÓNICA Se ubica en el puerto de Tampico, exactamente a la orilla del caudaloso río Pánuco que conecta a Tamaulipas con Veracruz. Allí se arman los principales barcos de la Marina Armada de México, con mano de obra mexicana.

Es el Astillero de Marina Número Uno, el principal referente de la industria naval en el país. Fue inaugurado por el ex presidente José López Portillo y, a la fecha, se han fabricado ahí 103 barcos. Entre las embarcaciones construidas en este astillero se cuentan navíos oceánicos, patrulleros costeros, abastecedores, remolcadores y pesqueros. El capitán de corbeta y subdirector de Proyectos en Ejecución de estas instalaciones, Francisco Rey Téllez Bautista, explicó que el Astillero de Marina Número Uno tiene un espacio de 43 mil metros cuadrados en el que se fabrica y se hacen toda clase de reparaciones. Téllez Bautista espera que se concluyan este año tres barcos que ya están programados. Destaca un buque abastecedor solicitado por la financieramente convulsionada paraestatal Pemex y que forma parte de lo que, en la presente administración, se proyectó como renovación de la flota marítima petrolera. “Es un abastecedor con capacidad para mil 800 toneladas de combustible, que será para la sonda de Campeche. Llevo 13 años en el Astillero de Marina y no hemos construido barcos similares”, comenta el capitán de corbeta a Crónica. Recordó que el astillero del puerto de Salina Cruz, en Oaxaca, fabricó seis remolcadores para Pemex, Coatzacoalcos hizo uno más y Guaymas hizo el doble. Hasta el momento no han hecho embarcaciones para la iniciativa privada. Se realizaron, dijo, adaptaciones para empresa naviera de Ciudad del Carmen Campeche hace cuatro años. Mientras explica el procedimiento constructivo de los barcos, el mando naval afirmó que han puesto en marcha siete patrullas costeras, las que ya vigilan las aguas del Golfo de México. La meta, dijo, es fabricar 20 en lo que resta de la administración del secretario de Marina, Vidal Francisco Soberón. “Esa es la meta, pero nos regimos por un presupuesto y nos puede retrasar en los tiempos de construcción”, reconoció. Para Téllez Bautista es un orgullo que se tome en cuenta al personal militar para impulsar el sector naval mexicano. Destacó un aspecto especial de su personal: la participación de las mujeres de la Marina que realizan labores de soldadura en los cascos de los barcos. La construcción de un barco dura poco más de un año y en el proceso manual participan cerca de 400 personas entre militares y personal civil eventual, con lo que se generan empleos directos e indirectos. Costos 25 mdd Una embarcación como la que construye en Tampico tiene un costo aproximado de 25 millones de dólares en el mercado internacional.