La noche de este viernes el Centro del municipio de Ozumba, Estado de México, se convirtió en un infierno cuando pobladores intentaron linchar a un supuesto delincuente; pero al no poder hacerlo, quemaron una patrulla municipal.
Los hechos ocurrieron cuando una familia que iba en un taxi se dio cuenta de un asalto y persiguieron al delincuente que se metió a una casa, la familia se metió a sacarlo, pero los habitantes del barrio Chintlahuil, al ver esto, se lanzaron contra el sospechoso.
En esta pelea, también afectaron a la familia que había descubierto al ladrón, lo que se convirtió en un caos y disturbios.
A la llegada de la Policía estatal se impidió que el ladrón fuera linchado y que los pobladores quemaran la alcaldía como amenazaban.
Los uniformados lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a los habitantes que gritaban que habría que linchar al delincuente.
El sujeto había sido pateado y jaloneado cuando fue llevado al kiosko municipal, donde se le quería linchar como escarmiento a todos los delincuentes que llegan a Ozumba.
Los habitantes antes de ser dispersados alcanzaron a quemar una patrulla municipal que estaba a un costado de la alcaldía y dañar otros dos vehículos.
Cerca de las 23:00 horas, los oficiales estatales habían retomado el control de la plaza municipal y rodeó la alcaldía para que la muchedumbre no se metiera a hacer desmanes.
Aun no se confirma si se trata sólo de un delincuente o más, así como si son secuestradores o rateros de la zona.
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