El secretario de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, declaró que el aumento a la gasolina era algo inevitable e inaplazable.
Reconoció que la decisión de eliminar el subsidio a los combustibles coincidió con la recuperación que registran los precios internacionales del petróleo, así como la depreciación del peso frente al dólar, lo que presiona al alza los costos de las gasolinas.
En este sentido, en el marco de la presentación del estudio “Evaluación Económica de México 2017”, que realizó el organismo que encabeza, el funcionario consideró que el retiro de los subsidios a los precios de los combustibles tuvo que haberse tomado hace 10 años, sin embargo, se aplazó y desafortunadamente, apuntó, se tuvo que tomar hoy en día.
Argumentó el secretario general de la OCDE, porque mantener ese mecanismo era insostenible para las finanzas públicas del país, por lo que era una decisión, dijo, “insostenible”.
“Era inevitable, inaplazable y además constituía en la forma anterior una mala asignación de los recursos presupuestales, que de por si son escasos”, afirmó el funcionario mexicano, quien estuvo acompañado por el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito (SHCP), José Antonio Meade.
Incluso, el también ex secretario de Hacienda afirmó que México era el único país de la OCDE que seguía aplicando subsidios a los costos de la gasolina.
Gurría Treviño reconoció que la decisión ha generado mucha controversia social, pero lamentó el vandalismo y saqueo de tiendas, comercios y gasolineras desatado en los últimos días.
En cuanto al desempeño de la actividad económica del país, el representante de la OCDE consideró que en 2016, el Producto Interno Bruto (PIB), habría alcanzado un crecimiento a tasa anual de 2.2 por ciento, ligeramente inferior al 2.3 que se reportaría en este 2017.
Para 2018, agregó, la estimación es de una expansión de 2.4 por ciento, por lo que sepultó cualquier posibilidad de alcanzar un crecimiento de 5.0 por ciento para el término de la presente administración federal, tal y como ofreció el gobierno federal al promover la aprobación de las reformas estructurales.
Bajo dicho contexto, el secretario general de la OCDE admitió que el actual ritmo de crecimiento económico resulta insuficiente para poder superar los diferentes retos que enfrenta el país, como abatir la pobreza y marginación.
De esta manera, dijo que las políticas económicas deben enfocarse en la redistribución de oportunidades, del ingreso, educación y sobretodo aumentar el gasto social porque el nivel actual es bajo para terminar con la pobreza.
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