• En nueve décadas, claro que el tricolor ha marcado en diferentes momentos y circunstancias políticas, el rumbo del país aún y siendo oposición, y hoy la realidad es sumamente cruel y trágica.
Por Mario Ruiz Hernández
VALLE DE MÉXICO., a 4 de Marzo del 2019.- En los escenarios de la alternancia en el poder público en el país, el PRI, ha sorteado de alguna forma sus circunstancias políticas y ha resurgido entre las cenizas,
A sus 90 años de edad, y cuando “todo mundo lo desahucio; lo ha hecho menos y hasta lo han enterrado los anales de la historia”, el PRI regresó a la presidencia de la República, hoy está lejos.
En lo que fue su extraordinaria recuperación, no pudo sostenerse en el poder, y mucho tuvo que ver el alto nivel de corrupción e impunidad en su extensión en el gobierno.
Los ex gobernadores encarcelados, la elevada criminalidad en el país, la inconsistente “guerra contra el narcotráfico”, que decirlo ellos no iniciaron, la simulación, la baja calidad de vida y el hartazgo social, los llevó al precipicio, dando oportunidad a la histórica instalación de un “Gobierno Democrático”, surgido de la izquierda y de otras fuerzas progresistas y movimientos opositores.
Por otra parte y dentro una combinación de lo arcaico, con lo nuevo; ciertos métodos que francamente aún y no cambia, una total disciplina, “porras y más porras, pasarelas y “besamanos” transcurre la fiesta.
Este día, sólo el recuerdo de lo que fueron, aquellas legendarias utopías, los sueños, los romanticismos políticos, y claudicación de sus ideales, los llevó a lo adverso.
El PRI admitirlo para las nuevas generaciones de “chairos, fifís y Millennials”, que fue parte importante de también, la historia de este país y la construcción de las instituciones.
En 90 años, el Revolucionario Institucional mutó de Partido Nacional Revolucionario en 1929, y en Partido de la Revolución Mexicana (1938- 1946), y hay quienes buscan un nuevo nombre.
Sin embargo, desde hace tiempo no hay PRI, y jamás lo entendieron, fue una extraordinaria empresa política que desde el centro, tomó las más altas decisiones y en la que prevaleció el presidencialismo para el caso.
En el tiempo, el tricolor dejó muchas cosas por hacer, y jamás se preparó para ser oposición, creando diversos PRI’s.
Hoy, al igual que hace unos años atrás, ir al cambio de su dirigencia nacional para que sea la militancia, mediante su voto directo, la que lo elija.
Hace unos días, la dirigente priista afirmó que “la democracia en el PRI llegó para quedarse”, quizá y admitiendo que en otros momentos no la hubo, y ante los nuevos escenarios, realizar algo inédito.
VALLE DE MÉXICO., a 4 de Marzo del 2019.- En los escenarios de la alternancia en el poder público en el país, el PRI, ha sorteado de alguna forma sus circunstancias políticas y ha resurgido entre las cenizas,
A sus 90 años de edad, y cuando “todo mundo lo desahucio; lo ha hecho menos y hasta lo han enterrado los anales de la historia”, el PRI regresó a la presidencia de la República, hoy está lejos.
En lo que fue su extraordinaria recuperación, no pudo sostenerse en el poder, y mucho tuvo que ver el alto nivel de corrupción e impunidad en su extensión en el gobierno.
Los ex gobernadores encarcelados, la elevada criminalidad en el país, la inconsistente “guerra contra el narcotráfico”, que decirlo ellos no iniciaron, la simulación, la baja calidad de vida y el hartazgo social, los llevó al precipicio, dando oportunidad a la histórica instalación de un “Gobierno Democrático”, surgido de la izquierda y de otras fuerzas progresistas y movimientos opositores.
Por otra parte y dentro una combinación de lo arcaico, con lo nuevo; ciertos métodos que francamente aún y no cambia, una total disciplina, “porras y más porras, pasarelas y “besamanos” transcurre la fiesta.
Este día, sólo el recuerdo de lo que fueron, aquellas legendarias utopías, los sueños, los romanticismos políticos, y claudicación de sus ideales, los llevó a lo adverso.
El PRI admitirlo para las nuevas generaciones de “chairos, fifís y Millennials”, que fue parte importante de también, la historia de este país y la construcción de las instituciones.
En 90 años, el Revolucionario Institucional mutó de Partido Nacional Revolucionario en 1929, y en Partido de la Revolución Mexicana (1938- 1946), y hay quienes buscan un nuevo nombre.
Sin embargo, desde hace tiempo no hay PRI, y jamás lo entendieron, fue una extraordinaria empresa política que desde el centro, tomó las más altas decisiones y en la que prevaleció el presidencialismo para el caso.
En el tiempo, el tricolor dejó muchas cosas por hacer, y jamás se preparó para ser oposición, creando diversos PRI’s.
Hoy, al igual que hace unos años atrás, ir al cambio de su dirigencia nacional para que sea la militancia, mediante su voto directo, la que lo elija.
Hace unos días, la dirigente priista afirmó que “la democracia en el PRI llegó para quedarse”, quizá y admitiendo que en otros momentos no la hubo, y ante los nuevos escenarios, realizar algo inédito.
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