Los principios básicos de una convivencia democrática son atropellados con la pretensión de desaparecerlos, eliminando el equilibrio de poderes, amenazando la libertad de expresión y de pensamiento.
El Presidente Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano Grijalva, afirmó que la corrupción ha empeorado, pues en el campo de los contratos otorgados por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, ocho de cada diez son por adjudicación directa, lo cual viola toda norma constitucional y legal.
El líder perredista recordó la desaparición de los 109 fondos y fideicomisos hecha en la Cámara de Diputados por MORENA y sus aliados, lo cual representó el quebrantamiento de los derechos humanos y el desarrollo de nuestro país, pues se hizo un recorte millonario a las disciplinas y actividades esenciales como la investigación científica, la protección de los derechos humanos, de periodistas y la previsión ante desastres naturales.
Lo anterior, dijo, ha significado la centralización de los recursos económicos en el Gobierno Federal para que sean administrados con intereses político-electorales, lo cual va en contra del combate a la corrupción que tanto pregona López Obrador, además de que violenta áreas tan importantes que se habían manejado con reglas de operación y transparencia muy claras en el uso de sus recursos.
“Los principios básicos de una convivencia democrática son atropellados con la pretensión de desaparecerlos, eliminando el equilibrio de poderes, amenazando la libertad de expresión, de pensamiento, así como la libertad de los medios de comunicación, pasando por encima del Estado de Derecho y usando el Ministerio Público con fines políticos, todo ello en la perspectiva de la concentración incesante, permanente y constante del poder en un solo individuo”, subrayó.
Zambrano Grijalva expuso que todo ello ha provocado la agobiante semiparalización de la planta productiva que ya se reflejó en los últimos datos preliminares del INEGI con el 8.5 por ciento de la caída del PIB del año pasado, el cierre de más de un millón de micros, pequeñas y medianas empresas, negocios cerrados; más de dos millones de empleos formales perdidos y aproximadamente 10 millones de personas que pasaron a la franja de la pobreza, así como el agrandamiento de la población en pobreza extrema.
El campo y el sector pesquero abandonado, la inseguridad en alarmante crecimiento con una errónea estrategia de abrazos y no balazos, aunado al condenable incremento de los feminicidios y violencia de género dentro del marco de la pandemia, “son señales inequívocas de que urge cambiar la estrategia política y sanitaria porque mientras López Obrador siga hablando de una aparente transformación a fondo, está conduciendo al país hacia un abismo”, asentó.
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