martes, 6 de diciembre de 2022

Presenta Naucalpan un balance favorable al Primer Año de Gobierno de la alcaldesa Angélica Moya, culmina obras abandonadas

•Los resultados son aceptables, luego de revertir en el corto plazo parte de los pasivos heredados, y solventar una gran parte de sueldos y prestaciones de ley a trabajadores.

Por Mario Ruiz Hernández

Naucalpan, Méx., diciembre del 2022.- Es importante claro que sí, el balance del gobierno municipal de Naucalpan a casi un año de instalarse en la alternancia pública.

Los resultados quizá no sean del todo los más extraordinarios, a consecuencia y decirlo claro y como es, del elevado pasivo histórico y también y de mayor impacto del último gobierno municipal de MORENA.

Lo cierto es que hay uno y demasiados daños a la hacienda pública, deudas que resultan impagables, y una serie de ilegalidades que hoy, el propio Organismo Fiscalizador (OSFEM), del Congreso viene observando de la cuenta pública 2021.

En ese marco de referencia, y pese a que nadie quiere hablar del pasado que duele y que también fue consigna del partido de AMLO de sus antecesores.

Lo anterior, dicho sea de paso, que hasta programaron dos asambleas informativas en la explanada del palacio municipal para exhibirlos, y francamente no hay analogía entre unos y los otros.

El situarnos en el aquí y el ahora, cuesta trabajo cuando se sabe que el ayuntamiento morenista ejerció más recursos de los que tenía autorizado.

El presupuesto modificado fue de cuatro mil 611 millones de pesos, pero ejerció cinco mil 132 millones, de los cuales la mayor parte fueron a servicios personales con dos mil 905 millones, es decir, el 45% de su gasto.

Otro 14% se erogó en servicios generales, un porcentaje idéntico en transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas, un 12% a pagar deuda pública y apenas un 6% a inversión pública.

Sin embargo, no se le pagó a personal sindicalizado sus salarios, y prestaciones de ley en tiempo y forma, y todavía hoy, arrastran un importante porcentaje de aguinaldos a cubrir de la administración pasada a liquidar, y otras cláusulas incumplidas del convenio laboral 2021.

Aunado a ello, a los de confianza que ellos mismos contrataron, además de localizar a poco más de 300 “aviadores” en el Instituto Municipal Atención a la Salud (IMAS), y no pagaron el ISR.

Informar y destacar en este primero año, de las obras abandonadas e inconclusas que dejaron y que concluyó el actual gobierno como la remodelación del centro deportivo “El Tepetatal”, y la repavimentación con concreto hidráulico de la avenida Centenario.

Resaltar también, las obras ejecutadas de este gobierno en Niños Héroes, Boulevard de las Misiones, Paseo Hacienda de Echegaray y Prolongación Diagonal.

Asimismo, la repavimentación, pero con concreto asfáltico la avenida San Luis Tlatilco, al tiempo de la rehabilitación de andadores urbanos.

La reinauguración y ampliación del centro de Rehabilitación e Integración Social (c), “Teresa de Calcuta”, la recuperación de estancias infantiles y el restablecimiento de los servicios médicos en clínicas municipales.

Un asunto y más, y que continúa en rezago, la pobreza patrimonial, la falta de certeza jurídica a los habitantes de la localidad, pero de sobremanera, el volver a diseñar un Nuevo Plan Municipal de Desarrollo Urbano, (PMDU), luego de que un juzgado de distrito lo declaro insubsistente.

Los fallidos puentes peatonales y deprimidos, en el cruce de la Av. 16 de septiembre y Gustavo Baz, en la Avenida Universidad, y hoy la recuperación de 35 pozos intervenidos y rehabilitados de 65.

La realidad, el trabajo viene avanzando lentamente, pero lo hay, no obstante, a “la herencia maldita”, el sobreendeudamiento, el incumplimiento a los compromisos asumidos y el desastre financiero.

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