Naucalpan acentúa el abandono de espacios públicos

• Un análisis de la subutilización de espacios debe ser el punto de partida de una política de desarrollo urbano. Hay que ver por qué la gente no usa los espacios públicos que existen.

Por Mario Ruiz Hernández En la inevitable progresión que se ha venido dando en el Naucalpan de hoy, en verdad que de un instante a otro, las cosas cambian y en ciertas situaciones, tal pareciera que la vida se paraliza. Dentro de los muchos análisis que se disponen respecto a esos grandes, medianos y pequeños espacios públicos, habría que ver por qué la gente no los usa o de plano, los abandona. Pero igual, existen sitios que pasados los años ni siquiera “una manita de gato”, un rostro nuevo y/o innovador, que valdría la pena. Sin embargo, en ciertos sitios, se ve un claro desarrollo positivo y el deseo de cambiar y poner los lugares al servicio de la sociedad. A pesar de todo el lastre económico y social que carga el país, las mejoras urbanas siguen pasando lentamente, llevando a la municipalidad una suburbanización aceptable. La pregunta clave es: ¿Cómo vemos el nivel de desarrollo urbano de una zona cuando estamos en esta zona? y en su periferia. En un mundo en que nada es lo que parece, la calle que parece de mala muerte; no lo es y al revés, donde todo parecía muy bonito prevalecen calamidades de todo tipo. En ese sentido, miramos lugares que se encuentra en quiebra y abandono y por desfortuna, así es como juzgamos hacia dónde va el desarrollo, si no ¿podemos usar la apariencia física como guía? Hay ciertos elementos que parecen claves para la evaluación del desarrollo urbano a nivel visual, pero hay que entrarle en los distintos centros de población al menos. Es decir, transformar “los rostros tercermundistas” que tenemos, lo mismo en “El Molinito”, Valle Dorado, “La Ahuizotla, y San Agustín, que el propio Naucalpan Centro-San Bartolo- No cabe ni la menor duda, que el mejor indicador de la calidad del desarrollo urbano es el uso de espacios públicos y semipúblicos. Hay muchas quejas sobre la falta de servicios, pero el corazón de Naucalpan está lleno de comercios, bares, chelerías, bases de transporte público, y cines abandonados, para hablar de espacios semipúblicos, ni hablar de parques y áreas con juegos para niños que no están siendo usados, ni en colonias populares. En nivel más premium, se ve el más alto nivel de desarrollo urbano de Ciudad Satélite, Lomas Verdes, comparado con Tecamachalco en la cantidad de personas en los espacios públicos y semipúblicos. Naturalmente, no todas colonias necesitan un mayor nivel de desarrollo urbano para cumplir con su papel; sin embargo, especialmente en zonas en la periferia, es importante elevar el nivel de desarrollo urbano y, por ende, intentar fomentar el uso del espacio público que hay. Existen fraccionamientos residenciales urbanos y semi urbanos; conjuntos habitacionales como “Las Américas”, Misiones, Boulevares, Jardines de San Mateo y Fuentes de Satélite que están llenos de casas. Sin embargo, el abandono de muchos espacios públicos dentro de esos perímetros demuestra el rezago en el desarrollo urbano del complejo y lo que es peor, la instalación de plumas para evitar el cruce de vehículos en sus interiores. La gran incógnita es la inseguridad que puede detener mucho el desarrollo del espacio público de una zona, y quizá la estamos comprobando. De cualquier forma, un análisis de la subutilización de espacios debe ser el punto de partida de una política de desarrollo urbano. Hay que ver por qué la gente no usa los espacios que hay. Igualmente, el saber que muchos espacios de esta naturaleza, que tienen su función, son también utilizados para otros fines que no son los de esparcimiento y recreación, sino para fomentar el ambulantaje y el comercio informal, en tanto que otros sirven para albergar a indigentes, personas en condición de calle, y delincuentes.