lunes, 4 de julio de 2016
México envejece cada vez más de prisa
La mayor esperanza de vida multiplica su población. De no tomarse medidas preventivas tendrán una vida empobrecida y de mala calidad. En 2020, el porcentaje llegará a más del 10%
A partir del 2020, México será un país envejecido, pues el sector poblacional prevaleciente será el de los mayores de 60 años, quienes, de no tomar medidas preventivas en materia de salud, alimentación y económicas, tendrán una vida empobrecida y con mala calidad.
Melquiadez tiene 74 años de edad. Desde hace siete se dedica a acomodar autos, o “viene, viene”, para completar sus ingresos, que son de unos 200 pesos al día.Aunque durante su juventud trabajó 17 años en una fábrica como obrero, y antes lo hizo como campesino, no alcanzó a tener una jubilación, por lo que tiene que dedicarse ahora a agilizar la vialidad en el estacionamiento de un centro comercial en el Estado de México.Melquiadez es uno de los poco más de diez millones de personas mayores de 60 años que hay en México, cuya población en vejez va en aumento.
“Me gusta, además me entretengo, gano mi dinerito y hago un poco de ejercicio, no me la paso sentado”, dice un optimista padre de tres hijos, todos mayores de 30 años.
PAÍS DE VIEJOS. Sergio Valdés, director de Atención Geriátrica del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM), señaló que actualmente poco más el 10% de la población tiene 60 años o más y se prevé que en el año 2050, por cada cuatro personas de la tercera edad habrá una persona menor de 60 años.El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señala que en el Censo de Población y Vivienda 2010 se contabilizaron a nivel nacional 112.3 millones de habitantes, de los cuales 10.1 millones eran mayores de 60 años, esto es, casi uno de cada diez habitantes.En la Encuesta Intercensal 2015, se contaron 119.5 millones de habitantes, de los que 7.2 por ciento es mayor de 65 años.
BOLSILLOS REMENDADOS. El Diagnóstico del Programa Pensión para Adultos Mayores 2013, realizado por la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), señala que el crecimiento de la población adulta mayor representa un reto para las políticas de desarrollo social y económicas, así como para los programas de reducción de la pobreza.
Los ingresos de las personas adultas mayores, indica el texto, son bajos debido a que, primero: quienes permanecen en el mercado laboral son principalmente aquéllos sin pensión ni jubilación, quienes trabajan por cuenta propia o en el sector informal en actividades que generan bajas remuneraciones.Segundo: la proporción de adultos mayores que no reciben ingresos por concepto de pensión o jubilación es alta debido a la escasa y desigual cobertura de los sistemas de pensiones, situación generada por un esquema de seguridad social vinculado directamente a la condición laboral del individuo, lo cual privilegia a los trabajadores en el sector formal de la economía.El principal problema que enfrentan los adultos mayores sin pensión ni jubilación, señala el estudio, es la escasa y desigual cobertura de los sistemas de pensiones, el limitado acceso a los servicios de salud de calidad y la ausencia de políticas efectivas de prevención de enfermedades, factores que agravan la vulnerabilidad que resulta de la caída del ingreso al final de la vida productiva y la dependencia debido a enfermedades crónicas y discapacidad de las personas adultos mayores. Sergio Valdés, del Inapam, expresó que “tenemos gente que ya se jubiló y que tiene una pensión o jubilación muy baja, o gente que no alcanzó una jubilación. Por eso el gobierno federal instituyó la pensión no contributiva, la de 65 y Más, que es una ayuda a gente que no contribuyó con impuestos para tener una pension”.
El apoyo para adultos mayores que entrega bimestralmente el gobierno federal a través del programa 65 y Más asciende a mil 160 pesos.Valdés indicó que en 15 o 20 años, los adultos mayores ya no tendrán una percepción mensual fija, por lo que aconsejó a quienes ahora son jóvenes ahorrar para su vejez.“No van a tener mensualmente su pensión, sino que se les va a dar en base a años trabajados y lo que hayan guardado".“Ése es el problema, que la gente está viviendo más años pensionada y jubilada que trabajando, porque la esperanza de vida ha aumentado”, expresó el geriatra.
Óscar Rosas Carrasco, especialista en medicina interna y geriatría del Instituto Nacional de Geriatría (ING), expresó que ningún sistema soporta una jubilación a etapa muy temprana, por lo que debe haber cambios en el sistema de pensiones y a la par debe haber incentivos e información suficiente para que el individuo, en una economía estable, pueda tener diferentes tipos de inversión que le permitan cubrir sus necesidades, como la de salud, que es donde más se invierte después de los 70 años, y resulta costosa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario