• Al margen de los planes del mañana, en donde al parecer tienen proyectada una gran Alameda con sus fuentes brotantes y otras cosas, el sitio, el espacio público dejará de existir como tal para pasar a otra etapa del Desarrollo Urbano en el legendario, San Bartolo.
Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN, Méx., a 19 de agosto del 2020. – Después de alrededor de 50 años de existencia, autoridades municipales que encabeza la alcaldesa, Patricia Elisa Durán Reveles, desaparecieron por completo “El Parque Revolución”, sepultando para siempre su historia, tradición, sentimiento de arraigo, pertenencia e identidad.
A sus más de cinco décadas, el lugar fue para muchos un espacio de recreación, de entretenimiento o simplemente de esparcimiento, donde la gente del legendario San Bartolo-o de otras comunidades, venían a socializar, al margen de lo que pueda hacer en el mañana, la reconversión de esta zona.
El Parque, en su evolución, sufrió de al menos dos transformaciones-al ser inaugurado-entre 1969-1970- y no erróneamente antes, el 12 de Octubre de 1947-debido a que ni siquiera existía como tal.
Recordar que, el área de más de 3, mil 087.293 metros cuadrados, asentaba lo que fue el Mercado Municipal de la Cabecera -San Bartolo-y la Escuela Primaria Isidro Fabela.
El mercado en su momento era un amplio tendajo de puestos, en el que se comerciaba de todo, como en aquellas grandes plazas o mercados prehispánicos semejantes al de Tlatelolco o el de Cuautitlán.
En su periferia, una serie de negocios establecidos y que resaltar la extraordinaria Lonja Mercantil-“El Puerto de Veracruz” de la Familia Cano Razo, Las Bodegas San Francisco de “Los Chimalpas”.
Aunado, a las tiendas de abarrotes de Jorge y Arcadia Cadena (Casa Cadena), Chucho Cano, Las carnicerías de “Don Daniel Vázquez y Doña Paz Rodríguez”, o de Don Francisco Colín y Doña Susana Sosa de Colín”, la marisquería de los Falcón, el Restaurante “Tepeyac”, de Gervasio Calderón y “Los Tacos de Don Pepe, Pablito y los de La Viuda”.
Además la panificadora de “Don Porfirio”, “Las cantinas las Mil Hierbas, La Jalisco, La Lupita, las pulquerías de Zenaido Navarro y La Unión de los Amigos de Don Nacho Gil”, entre otros tradicionales negocios-las “carnitas de los Arzate o del Chaparrito en la Calle de Abasolo”, la Flor de Orizaba, de la familia de Carlos (Carlota) y el Dr. Lino Guzmán, a la vez de también marisquería de Don Manuel Vega.
Por otra parte, precisamente a un costado, o la mitad del área, “La Escuela Primaria Matutina y Vespertina, Lic. Isidro Fabela, que dio instrucción educativa a cientos de miles de Naucalpenses.
El ir al pasado, evidentemente destacar también, la mutilación impecable del Kiosko de cantera, situado al centro del espacio educativo-en el periodo de la alcaldesa, Angélica Moya Marín-
El emblemático kiosko, majestuoso testigo de las una y diversas generaciones de jóvenes que ahí, retrataban siempre la imagen de la salida de sexto año, o de la graduación de los que estudiaron en ese plantel que se fue del lugar, junto con el mercado de la cabecera que se incendió, al complejo que hoy conocemos sobre la avenida Universidad, Estacas y Morelos.
Nadie pues, pretendía mudarse a aquel perímetro entre milpas y lagunas, la escuela primaria que tuvo que recepcionaron a los nuevos estudiantes y los que ya estudiaban y los locatarios a volver a empezar.
En otro orden y en el tiempo, San Bartolo justamente y todavía como hoy, es un centro de comercio, al lado de ese desparecido Parque Revolución, que durante años mantuvo intacto el kiosko, la Fuente y los bustos de los Héroes de la Revolución, hasta que lo deformaron.
La transformación fue tan radical, que jamás lució y para nada, los bustos amontonados en una mini plazuela, un kiosko en un extremo que sirvió de nido de indigentes y una fuente bailarina que solo en la inauguración lució perfecta, y el demás tiempo se la pasó más en composturas que otra cosa.
Hoy, concluye toda una tradición del desparecido Parque Revolución según para la construcción de una amplia Alameda, con su fuente de agua brotante para los visitantes y otras cosas a considerar.
Con ello y al parecer sin la anuencia vecinal y como siempre, el proyecto a desarrollar, en donde hay quejas ciudadanas de ecocidio, abandono de la obra y desconocimiento total de los trabajos.
Así también, de otros planea a ejecutar en la Zona Centro de Naucalpan, como precisamente obras de movilidad urbana, en el que se tiene contemplado un puente peatonal sobre la Av. Gustavo Baz, y 16 de Septiembre, Estacas y Av. Universidad, ante el categórico rechazo de los habitantes de la cabecera.
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