López Obrador amenaza con denunciar a Peña Nieto por traición a la patria

López Obrador amenaza con denunciar a Peña Nieto por traición a la patria El opositor vuelve a convocar a sus seguidores en el Zócalo de la capital para protestar por la reforma energética Juan Diego Quesada México El excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador volvió este domingo al Zócalo, la principal plaza pública de México, para redoblar su desafío al presidente Enrique Peña Nieto, inmerso en la tarea de sacar adelante un paquete de reformas que, según el Gobierno, ha de marcar el futuro del país. Obrador le exigió que detenga de inmediato la reforma energética, que plantea la apertura de la compañía Petróleos Méxicanos (Pemex) - propiedad del Estado - a inversores privados. En caso contrario, amenazó con demandarle "por traición a la patria". Obrador llamó a los suyos, que llenaban la plaza en una demostración más de su poder de convocatoria, a imitarle y a extender esas querellas a los legisladores que con sus votos modifiquen los artículos 27 y 28 de la Constitución (nacionalización del petróleo y explotación de los recursos por parte del Estado). Animó a la gente a aplicarles "un juicio popular". Un sector de la izquierda considera que alterar esos dos puntos - vigentes tras la expropiación de la industria petrolera en 1938 que llevó a cabo el presidente Lázaro Cárdenas - supone privatizar y entregar a manos extranjeras un recurso propiedad de todos los mexicanos. El que fuera el candidato de consenso de la izquierda mexicana en las elecciones generales en 2012, fundador después de un movimiento llamado Morena, argumentó que Pemex no necesita llevar a cabo ninguna reforma al tratarse de "una de las empresas más rentables del planeta". "No es cierto que estemos obligados, por falta de inversión, a compartir las ganancias de la industria petrolera nacional (…) Obtiene ingresos por 125.000 millones de dólares anuales. Ocupa el treceavo lugar en las corporaciones latinoamericanas. Es la 34 de todo el mundo. Y, si es cierto que necesita tecnología [un argumento del Gobierno], esta puede adquirirse con el dinero que genera", dijo delante de una gran pancarta que venía a reforzar su discurso: "No al robo de todos los tiempos". Las últimas noticias sobre Pemex no son tan halagüeñas. De acuerdo al reporte financiero que la compañía entregó la semana pasada a la Bolsa Mexicana de Valores, en el periodo de enero a septiembre tuvo unas pérdidas que rondan los 7.000 millones de dólares. Los números rojos se deben al descenso en las exportaciones de crudo y al incremento de los gastos generales de la compañía, según ese mismo informe. El izquierdista advirtió además a las compañías extranjeras que tengan pensando en invertir en Pemex que esos contratos quedarían invalidados en un futuro, se entiende que en el caso de que él llegara al poder. Aunque se centró en la energética, López Obrador también llamó a combatir el resto de reformas. Obrador reiteró, como hizo hace tres semanas en otra movilización por las calles de la ciudad, la necesidad de realizar "un cerco civil pacífico" en los alrededores del Senado y el Congreso en el momento en el que se estén votando las propuestas. Quizá este sea el paso más decidido a la resistencia en contra de los planes del Gobierno de los dados hasta ahora fuera de las cámaras. López Obrador se ha presentado una vez más, respaldado por los suyos, como el último muro de contención que puede detener los deseos de Peña Nieto. No explicó cuál es la forma jurídica que utilizaría para "enjuiciar" al priista por traición a la patria. El presidente lo ha ignorado en todo este proceso. Dos no bailan si uno no quiere.