El presidente de la República, Enrique Peña Nieto firmó dos decretos, que forman parte de las medidas preventivas establecidas en el Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar.
En compañía de su gabinete económico, Peña Nieto signó los decretos presidenciales que complementan un esquema simplificado de cumplimiento fiscal para los pequeños negocios; y comenzarán a operar en febrero de este año y podrán participar 97% de los negocios del país y que cuentan con ingresos de hasta 5 millones de pesos.
En el salón Adolfo López Mateos de Los Pinos, explicó que el decreto para la deducibilidad inmediata es una herramienta de política fiscal que busca incentivar la inversión de las PyMEs (Pequeñas y Medianas Empresas) y promover la producción, el empleo y el fortalecimiento económico.
“Este esquema de deducción permite que las empresas aceleren las inversiones programadas en el mediano plazo, pues adelanta el beneficio fiscal de la deducción. Una empresa deduce el valor de los bienes de activo fijo desde el momento en que se adquieren”, explicó.
En el esquema tradicional, deben esperar a que sus inversiones se deprecien para poder realizar las deducciones correspondientes. Este mecanismo es útil para las PyMEs, pues enfrentan un acceso restringido al crédito y a tasas de interés más elevadas.
Los contribuyentes con actividades empresariales en el ejercicio inmediato anterior de hasta 100 millones de pesos, podrán efectuar deducción inmediata de la inversión de bienes nuevos de activo fijo. Renovará la aplicación de la deducción inmediata por las inversiones realizadas en 2017 y 2018, durante enero de 2017.
Se deduce la cantidad del monto original de la inversión con base en los porcentajes establecidos, en el ejercicio en el que se adquieren los bienes. Habrá una tasa de descuento de 3%, como la de 2016, para las inversiones realizadas en 2017 y de 6%, para las inversiones que se realicen en 2018.
Asimismo, Peña Nieto y el secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña coincidieron en que “la repatriación de capitales” se refiere al retorno de recursos invertidos en el exterior.
Permite fortalecer las inversiones y crear expectativas respecto del futuro económico del país. Se espera que el Programa de Repatriación de Capitales genere un inversión de 10 mil millones de pesos, de acuerdo a estimaciones del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El decreto señala que los ingresos que se retornen al país, se inviertan y permanezcan en territorio nacional por un plazo de al menos dos años, podrán gozar de un impuesto preferencial de 8 por ciento.
Los beneficios tendrán una vigencia temporal de 6 meses, que iniciarán a partir de la entrada en vigor del decreto. Aplica para los recursos que retornen y que se hubiesen mantenido en el extranjero con anterioridad al 1 de enero de 2017. El impuesto se deberá pagar dentro de los 15 días siguientes a la fecha de retorno.
Se considera que las personas morales invierten los recursos en el país, cuando se destinen a:
1.Adquisición de bienes de activo fijo que sean utilizados para realizar sus actividades en el país.
2.Adquisición de terrenos y construcciones en México, utilizados para realizar sus actividades.
3.Inversiones destinadas a la ejecución de proyectos de investigación y desarrollo de tecnología.
4.Pago de pasivos; pago de contribuciones o aprovechamientos; así como el pago de sueldos y salarios derivados de la prestación de un servicio personal subordinado en territorio nacional.
5.Realización de inversiones en México a través de instituciones de crédito o en casas de bolsa.
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