• En la próxima legislatura federal, nada hay que imposibilite dar solución a los problemas de movilidad, conectividad, y medio ambiente en la ZMVM.
Por Mario Ruiz Hernández
VALLE DE MÉXICO., julio del 2018.- Entre las numerosas reformas en el Congreso de la Unión, y esas de gran calado, no son menores aquellas de la coordinación municipal.
Es decir, lograr la concurrencia entre los distintos órdenes y niveles de gobierno para resolver los problemas y conflictos de las conurbaciones en el país.
En la oportunidad histórica que se presenta en la LXIV, Legislatura Federal a instalarse el próximo 1° de septiembre, avanzar en “La Reforma Posible al 115° Constitucional”.
Lo anterior, en lo que respecta a incorporar la figura metropolización y/o metrópoli, que permita esa justamente concurrencia sin impedimento alguno y superar esa amplia agenda.
En este sentido, y ahora que habrá una mayoría absoluta del partido morena, así como en las delegaciones de la CDMX y municipios mexiquenses, concibo que no habrá pretexto.
La lógica indica, y en la toma de decisiones, todo se resume en la total voluntad del partido de AMLO, para ir dándole salida a temas estratégicos de medio ambiente y explosión demográfica
Aunado, al sistema hídrico del Valle de México, movilidad, conectividad, pobreza patrimonial, y en servicios básicos como por ejemplo, recolección de basura y seguridad pública, entre otros.
En el próximo parlamento federal y con gobiernos del mismo color, vale la pena proyectar nuevas vialidades o transporte masivo, que resuelva el problema de movilidad en la ZMVM.
Es de referir, que en promedio los mexiquenses invierten tres horas de su vida en moverse de sus residencias hacia sus centros de trabajo; y suman cinco millones de personas en edad laboral.
Son en la entidad, 15 millones de horas-hombre pérdidas en todo el Edomex, y recursos económicos multimillonarios, además del pésimo transporte público.
Concebir que al facilitar la movilidad, se mejora la calidad de vida y por ende la eficiencia que tenga en las fuentes de trabajo, en tanto el evitar el estrés producido por las grandes metrópolis.
Los propósitos, robustecer esa agenda y dar soluciones impecables en el corto, mediano y largo plazo e incluso, consolidar la bolsa que representa la etiqueta del Fondo Metropolitano.
En ello, para el financiamiento de numerosos proyectos ejecutivos en obras que solventen las complicaciones regionales y que contribuyan a elevar la calidad de vida.
De igual manera, instrumentar una política de prevención en el capítulo del agua, su consumo, y explotación irracional; la contaminación de vasos reguladores, presas y ríos, y escasez.
Lo mismo, la saturación urbana, la progresión desmedida de nuevos conjuntos habitacionales de todo tipo, y a la inversa, el crecimiento de numerosos todavía cinturones de miseria.
VALLE DE MÉXICO., julio del 2018.- Entre las numerosas reformas en el Congreso de la Unión, y esas de gran calado, no son menores aquellas de la coordinación municipal.
Es decir, lograr la concurrencia entre los distintos órdenes y niveles de gobierno para resolver los problemas y conflictos de las conurbaciones en el país.
En la oportunidad histórica que se presenta en la LXIV, Legislatura Federal a instalarse el próximo 1° de septiembre, avanzar en “La Reforma Posible al 115° Constitucional”.
Lo anterior, en lo que respecta a incorporar la figura metropolización y/o metrópoli, que permita esa justamente concurrencia sin impedimento alguno y superar esa amplia agenda.
En este sentido, y ahora que habrá una mayoría absoluta del partido morena, así como en las delegaciones de la CDMX y municipios mexiquenses, concibo que no habrá pretexto.
La lógica indica, y en la toma de decisiones, todo se resume en la total voluntad del partido de AMLO, para ir dándole salida a temas estratégicos de medio ambiente y explosión demográfica
Aunado, al sistema hídrico del Valle de México, movilidad, conectividad, pobreza patrimonial, y en servicios básicos como por ejemplo, recolección de basura y seguridad pública, entre otros.
En el próximo parlamento federal y con gobiernos del mismo color, vale la pena proyectar nuevas vialidades o transporte masivo, que resuelva el problema de movilidad en la ZMVM.
Es de referir, que en promedio los mexiquenses invierten tres horas de su vida en moverse de sus residencias hacia sus centros de trabajo; y suman cinco millones de personas en edad laboral.
Son en la entidad, 15 millones de horas-hombre pérdidas en todo el Edomex, y recursos económicos multimillonarios, además del pésimo transporte público.
Concebir que al facilitar la movilidad, se mejora la calidad de vida y por ende la eficiencia que tenga en las fuentes de trabajo, en tanto el evitar el estrés producido por las grandes metrópolis.
Los propósitos, robustecer esa agenda y dar soluciones impecables en el corto, mediano y largo plazo e incluso, consolidar la bolsa que representa la etiqueta del Fondo Metropolitano.
En ello, para el financiamiento de numerosos proyectos ejecutivos en obras que solventen las complicaciones regionales y que contribuyan a elevar la calidad de vida.
De igual manera, instrumentar una política de prevención en el capítulo del agua, su consumo, y explotación irracional; la contaminación de vasos reguladores, presas y ríos, y escasez.
Lo mismo, la saturación urbana, la progresión desmedida de nuevos conjuntos habitacionales de todo tipo, y a la inversa, el crecimiento de numerosos todavía cinturones de miseria.
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