viernes, 14 de septiembre de 2018

A 208 Años de Reflexión Patria y Libertaria

• En el planteamiento que se propone, saber que tan Nacionalistas somos y al igual que en el país, el ejercicio de conciencia público en nuestro querido Naucalpan.

Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN Méx., a 14 de septiembre del 2018.- En la antesala de la Conmemoración del 208 Aniversario de la Independencia de México, sabréis el qué tan patriota somos.
El espíritu Nacionalista sale a flote en estos días, al recordar aquellos hombres y mujeres que nos dieron justamente Patria y Libertad.
En la reflexión que se propone, mirar en el aquí y el ahora, lo que verdad hemos hecho en nuestro tiempo, para honrar a México y a los Mexicanos.
Bajo esa lógica, ir a la introspección de cada uno de nosotros en el sentido estricto de las aportaciones que heredamos a las nuevas generaciones del presente y del futuro.
Destacar así en lo mínimo, el enorme compromiso que tenemos para con el país, para llevarlo a mejores condiciones en todas la áreas de oportunidad y sentidos.
México ha evolucionado, es completamente otro, nos asiste una completa realidad que es inocultable en materia de seguridad, los altos niveles de criminalidad y violencia, como jamás antes
Al parecer, nos encontramos incluso, plagiados por la delincuencia; lo anormal pareciera ser tan normal, al grado tal que la capacidad de asombro se ha perdido.
Por otra parte, y si observamos al país en su instancia municipal, aquí pues en el lugar en que vivimos y en el que socializamos, prevalecen situaciones también, sumamente catastróficas.
Naucalpan igual, sostiene uno e indefinidad de problemas, atrasos y rezagos que sinceramente no van, con su grandeza.
En la otrora “Joya de la Corona”, lamentablemente en los últimos gobiernos municipales mantuvieron una serie de filtros de corrupción impresionantes y fueron quienes tomaron las decisiones.
“El completo poder tras la silla, los negociantes de la impunidad para dejar las cosas en claro, y en ellos persistieron algunos ejemplos que conocieron con “Doña Azu, Súper Kairos y Olvera”.
Esposos, padres y hasta hermanas de ex alcaldes, incrustadas en esas perversas redes de mando aún y más poderosas que el presidente municipal que sirvieron para todo tipo de manejo.
Es decir, el financiero, el político, el de los negocios externos, el de la búsqueda de un cargo público, el de las anuencias y/o permisos, los cambios de usos del suelo y densidades.
Aunado, a la operación política, la “compra de voluntades”, los excedentes y la presumible compra de propiedades en el municipio, el país y en el extranjero con según el presupuesto público.

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