miércoles, 4 de septiembre de 2019

“Crónicas del tiempo”… El otro Naucalpan, el de “La Villa de San Bartolo” que nadie festejó

• En este noble territorio, hay un testimonio o fragmento de vida y una biografía familiar, que merece el saberse contarlo. “Ellos No lo hicieron, nosotros Sí”…

Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN Méx., a 4 de septiembre del 2019.-Más allá de la Conmemoración del 145 Aniversario que elevó a categoría de “Villa al pueblo de San Bartolo”, agregándole la denominación “de Juárez”, en honor al ex Presidente de la República, con extraordinario asueto gubernamental.
Por otra parte, en verdad que sí hay mucho que festejar de este Naucalpan que ha venido evolucionando bastante en diversas áreas de oportunidad, y que trasciende en la línea del tiempo.
“Si ellos No”, nosotros sí podemos agradecer al Pueblo de este “Lugar de las Cuatro Casas”, su generosidad, al darnos a cientos de miles de hombres y mujeres, el asentamiento para una mejor morada.
Naucalpan es pertenencia, es arraigo, es identidad y un extraordinario nicho para todos aquellos que aquí hemos socializado, hecho vecindad y de sobre manera, elevado la calidad de vida.
Es cierto, y en su evolución histórica, en donde en diversas partes de la geografía municipal, hay un testimonio o fragmento de vida y una biografía familiar, que merece el saberse contarlo.
Sin embargo, ningún acto público, nada que resuene u algo que adquiera lógica o sentido, quizá en esa “Villa de San Bartolo”, o en esa majestuosa periferia de nuestros pueblos originarios.
Saberse sois Otomí, tal vez mazahua, náhuatl, o Matlazinca, sobreviviendo en las partes Altas de Villa Alpina, “El Guarda” en San Francisco Chimalpa, Santiago Tepatlaxco y otros sitios.
Lugares incluso, que han sido devorados por “La Mancha Urbana” y la irresponsabilidad oficial, y de esos tantos y otras comunidades indígenas que se han resistido a morir, en la evolución del tiempo.
Decir, comunidades justamente que entrañan, la alegoría de las Batallas Mexicas, la independencia de México y la Utilización de sus símbolos Religiosas, “La Reforma y El Juarismo”.
El hoy llamado y maltratado “Puente Mexicas”, un camino que cruzaba el Río de los Remedios lo que ayudó a establecer una comunicación más rápida y expedita con la Ciudad de México.
El Naucalpan que bajo el gobierno de Juárez, inició su proceso de industrialización, inaugurando la Fábrica de Telas del Río Hondo Fabrics Factory en 1869 (aunque la fábrica fue fundada en 1867).
Dos años más tarde-1869- comienza una lenta pero ambiciosa experiencia industrial en la naciente Villa, continuada por la presencia de Hilazas La Abeja y El Molino de Trigo.
Naucalpan completamente dedicada a la economía agrícola, la Villa poco a poco alberga a pequeñas industrias en las orillas de sus ríos.
Años más tarde, durante la presidencia de Porfirio Díaz es inaugurada la línea de ferrocarril México-Acámbaro y la estación San Bartolo.
Comunicar, esos indistintos episodios del “Porfiriato y de los Revolucionarios”, los hombres a caballo, y “Las Soldaderas”.
El 8 de diciembre de 1894 se construyó una plaza de toros con estructura de madera llamada el Toreo. 53 años después se relocalizó a la zona (Cuatro Caminos) y se reconstruyó con una estructura de acero.
La cual hoy en día ha sido demolida para la construcción de una plaza comercial. La electricidad fue introducida en Naucalpan, el 10 de agosto de 1906, bajo el gobierno de Porfirio Díaz.
Si hay que Festejar, “Ellos NO”, porque No son de aquí, son figuras en Tránsito y no de esas que emergieron de Naucalpan en la Revolución Mexicana como Román Díaz Rosas, y Arnulfo Chávez.
Al igual que Alfredo Basurto García, Camilo Santos, Encarnación Díaz, Ezequiel Villavicencio, Felipe Ángel Fortuño Miramón, Joaquín Bolaños Camacho, Luis Medina Barrón, Manuel Ramírez, Manuel Villanueva, Rodolfo González y Toribio Velasco.
En sí, una serie de personajes de Historia y no de Historieta; el admitir de “La Joya de la Corona” robada, su acelerado crecimiento industrial y el nacimiento de las Colonias Emergentes o populares
El auge y la decadencia, los dos rostros en un abrir y cerrar de ojos; ese San Bartolo-esa Villa- que recuerda una serie de portales; los argollas para el amarre de caballos en la calle y petrolerías.
El antiguo Rastro municipal en la Calle de 5 de Mayo, “La Cruz Roja”, “La Cárcel de Barandilla y su comandancia en la Av. 16 de septiembre, y el complejo del Palacio de Gobierno.
La magnífica lonja mercantil “El Puerto de Veracruz”, “La Mil Hierbas” “El Chamizal”, la serie de pulquerías, “Los Charros y La Becerrilada y Navarro”, esa memoria que no se quiere apagar.
Naucalpan alcanzó la categoría de Ciudad en 1957. El mismo año comenzó la construcción del desarrollo residencial Ciudad Satélite, sobre las tierras del Rancho La Herradura, que fue vendido por el ahora ex-presidente Miguel Alemán.
Aun así, el conservó una parte del terreno para él mismo y su familia y construyó una mansión, la cual hoy todavía se puede ver y que está detrás de Comercial Mexicana Satélite.
En los años siguientes se dio un gran crecimiento urbano creándose centros residenciales como Lomas Verdes, Fuentes de Satélite y Bosques de Echegaray.
En 1971, la tienda comercial Plaza Satélite fue fundada, solo a unos pasos de la residencia de los Alemán.
En 1976 El Congreso del Edomex otorgó a la municipalidad el actual nombre de Naucalpan de Juárez. En 1977 El Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia DIF, se fundó como Instituto Nacional de Protección a la Infancia (INPI), entre 1962 y 1963, y los desayunos de 15 centavos.
No obstante, en 1977 cuando se fusiona con el Instituto Mexicano de Asistencia a la Niñez (IMAN) y nace lo que hoy conocemos como Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), en donde su principal objetivo es brindar servicios de asistencia social oportuna, eficaz, equitativa, humanitaria y de calidad en apoyo a la población más desprotegida; y antes en 1971 abrió sus puertas el CCH-Naucalpan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario