• Por el momento, no hay nada que pueda evitar las descargas
de aguas residuales al sitio, y urgen sea atendido el exhorto al ejecutivo
federal para declararla Área Natural protegida en la categoría de santuario.
• Asimismo, y para que los municipios de Atizapán de
Zaragoza, Naucalpan, Santa Ana Jilotzingo y Xonacatlán mejores sus descargas.
Por Mario Ruiz Hernández
Valle de Mexico, octubre del 2022. – Esperemos que pronto,
la persona titular del Poder Ejecutivo Federal, respetuosamente pueda atender
el exhorto que el Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso del Edoméx, por
medio del diputado proponente, David Parra Sánchez, para que haga la
declaratoria a la Presa Madín como Área Natural Protegida, en su categoría de
Santuario.
Asimismo, dentro de las facultades requerir a los
ayuntamientos de Atizapán de Zaragoza, Naucalpan, Santa Ana Jilotzingo y
Xonacatlán, mejoren sus descargas de aguas residuales vertidas en este cuerpo
de agua.
Lo anterior, debido a que la contaminación en la Presa Madín
continúa de manera por demás delicada, y aún no se ha podido frenar esas
vertientes de aguas negras que llegan directamente a la presa.
Efectivamente, el saneamiento de más de 16 hectáreas de
lirio acuático fue una realidad, gracias a los ayuntamientos de Naucalpan y
Atizapán de Zaragoza, la CAEM y Conagua, así como numerosos ambientalistas que
domingo a domingo realizaban su cruzada de limpieza en el primer semestre del
año.
Sin embargo, la plaga fue tan sólo una parte, y hoy en día,
la muerte de aves es toda una realidad, los desechos orgánicos, plásticos y
todo tipo de inmundicias no paran.
El agua lo hemos citado en múltiples ocasiones, está
contaminada con metales pesados, plaguicidas, fármacos y químicos.
De igual manera, diazinon y fention; diclofenaco, ibuprofeno
y metformina; residuos de productos de higiene personal y bloqueadores solares,
entre otras sustancias químicas.
A Presa Madín llegan descargas de drenajes de al menos 18
desarrollos y asentamientos ubicados en Zona Esmeralda, La Concordia, en la VI
sección de Lomas Verdes y del pueblo de Nuevo Madín.
Los niveles del agua cada vez son más bajos, y no se tiene
garantía alguna de que sea garantizado el abasto al menos de la población
aledaña, y menos pensar de llevarse el agua a la CDMX.
En verdad urge el llamado y la declaratoria, toda vez que,
si no la hay, “el exhorto quedará en el tintero”, en el “archivo viejo” de las
comisiones legislativas y como que no pasó nada”.
Por otra parte, valdría la pena una gran jornada de
limpieza, y reforestación en la Presa, de todos, digo, todos los grupos
ambientalistas, políticos y hasta sociales, más que en el discurso, el trabajo.
Sabemos y de tiempo atrás, que el crecimiento urbano
desordenado ha contaminado las aguas de la presa a donde nuevos
fraccionamientos y poblaciones descargan sus aguas residuales.
Del inmobiliarismo es por demás, habrá que éntrale con
pasión, a su rescate, no hay de otra, hasta que hagan la declaratoria, y aún y
con ella, el quehacer es todavía mayúsculo.
Requerimos de la voluntad social, de esos grupos
organizados, todos cuentan, todos suman, y como para levantar basura, no
necesitamos grandes litigios, necesitamos acción y ya.
Es triste ver como la fauna, y la flora acuática y la biodiversidad se viene perdiendo, y no nos podemos quedar con los brazos cruzados, a ver cuándo quieren atender el exhorto.
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