- El gerente de la Comisión de Cuenca de Presa Madín, afirmó
tajante que se debe cuantificar además justamente el daño, todavía a parte de
la explosión.
- El lugar arroja lixiviados al cuerpo de agua y que provocó
el ecocidio y la mortandad de fauna acuática, es decir de peces y otras
especies, de la flora y de la biodiversidad, y siguió operando.
- El académico aseguró que el sitio no cumple con la NOM de
relleno sanitario, en la práctica dijo, es un tiradero de basura a cielo
abierto.
- Precisó que el espacio fue construido sobre barrancas y
arroyos tributarios del Río San Juan que vierten sus aguas en la Presa Madín.
Por Mario Ruiz Hernández
Naucalpan, Méx. julio del 2023. – “No basta con la clausura
del tiradero de basura que explotó en Tepatlaxco y ni por si m ismo resuelve el
grave problema”, afirmó Eduardo Espinosa Medel, gerente de la Comisión de
Cuenca de Presa Madín.
Consideró que se deben reparar los daños ambientales
causados por el tiradero de basura presentado como relleno sanitario y tiene
que ser la empresa y contribuir con recursos los ayuntamientos de Naucalpan y
la CDMX.
El tiradero arroja lixiviados a la Cuenca de la Presa Madín,
y que provocó el ecocidio y la mortandad de fauna acuática, es decir de peces y
otras especies, de la flora y de la biodiversidad.
Espinosa Medel aseguró que el sitio no cumple con la NOM de
relleno sanitario, en la práctica dijo, es un tiradero de basura a cielo
abierto.
Precisó que el sito fue construido sobre barrancas y arroyos
tributarios del Río San Juan que vierten sus aguas en la Presa Madín, con
pendientes importantes, por lo cual los lixiviados se acumulan en éstas.
Destacó que tampoco el “tiradero a cielo abierto” no cuenta
con geomembranas bien colocadas y respiradores para obtener el gas metano y
utilizarlo para generar energía eléctrica, toda vez que indicó que un buen
relleno sanitario cuenta con esto.
Aunado a ello, además no cuenta con áreas de transferencia
de residuos sólidos donde se separen éstos, por lo cual la basura se coloca en
forma discriminada.
Recordó que en agosto del 2021 se murió una tonelada y media
de peces en la Presa Madín como consecuencia de la salida de lixiviados del
basurero y le pusieron sellos de clausura de nueva cuenta.
El académico expuso que el artículo 10 de la Ley Federal de
Responsabilidad Ambiental establece que la empresa responsable del relleno es
la que tiene que reparar el daño ambiental, el cual consiste en llevar el
terreno a su estado general.
Enfatizó que son corresponsables de este hecho el Gobierno
del estado de México, el ayuntamiento de Naucalpan de Juárez, Atizapán de
Zaragoza y la CDMX que tira la basura en este.
Reiteró que las clausuras por si mismas no resuelven el
problema, entonces dijo, la PROFEPA debe denunciar ante la Fiscalía General de
la República y cuantificar el daño ambiental que la empresa debe repararlo.
Comentó que, en el recorrido que realizaron en mayo del 2022
acompañando al perito del juzgado, para delimitar el perímetro del tiradero se
dieron cuenta de las fallas en las geomembranas.
En sentido manifestó que observaron la cantidad de desechos
como cables, papel, bolsas, residuos orgánicos, etcétera.
“Con las lluvias se infiltra al fondo de las barrancas y se generan los lixiviados, los cuales salen del tiradero y llegan al Río San Juan”, concluyó.
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