La opinión de ...Salvador Ferrer i Paradeda (Madres que preguntan cosas obvias)

MADRES QUE PREGUNTAN COSAS OBVIAS Salvador Ferrer i Paradeda.

¿ Por qué las madres preguntan cosas obvias ? Reflexionemos durante unos segundos... Para camuflarse en verdades y saber realidades. Detrás de una pregunta obvia esconden una efectiva que no se atreven a hacer en la lógica diaria y hasta incluso agotadora en la relación madres - hijos. La trampa es sencilla pero muy eficaz; si preguntar una cosa evidente bordea la más simple estupidez, seguir esa lógica y responder aquello que se pregunta es un símbolo de imbecilidad natural y un tanto envuelto en la bobada cotidiana. Las madres lo saben, lo intuyen - que para el caso es lo mismo - y hacen preguntas obvias, no para que se respondan, más bien para inducirnos a responder lo que imaginamos preguntan en aquel momento. Un modo de interrogar sin riesgo alguno por su parte, apoyándose en el hecho de ser madre. Veamos situaciones que nos llevan a tamaña reflexión escondida tras frases aparentemente intranscendentes envueltas en quién sabe qué. Situación no. 1. Te bañas, te vistes con la mejor ropa, la última moda del momento, añades un toque de la colonia que tu padre guarda para grandes ocasiones, tomas la chamarra ya que está lloviendo, abres la puerta con cautela, casi a escondidas y justamente en el instante que inicias las tópicas y típicas frases de despedida, la madre pregunta; ¿ Vas a salir ? La pregunta real es: ¿ a dónde vas ? Situación no. 2. A la hora de comer, encima de la mesa se acumulan platos de macarrones, pollo con Chile y las tortillas. La madre regresa de la cocina con un poco de fruta y pregunta; ¿ Ya estás comiendo ? La pregunta real es: ¿ en qué estás pensando, qué te ocurre? Situación no. 3. La novia y tú, sentados en un rincón apartado del parque. Hace un mes que salís juntos y mientras os dais un beso fugaz, disimulado, buscando mutuamente la muela del juicio, por accidente, la madre que ni tan siquiera conoce a la susodicha novia, pasa junto a vosotros y pregunta; - ¡ Ah !, hola, ¿ sois amigos ? La pregunta real es : ¿ vais juntos a la cama ?, ¿ desde cuándo?. Situación no. 4. Hace un ratito que sonó el teléfono y hablas en voz baja porque no quieres que tus padres sepan los planes del fin de semana con los amigos, aprovechando que ellos van a visitar a un compadre. Volteas y descubres a tu madre que está escuchando junto a ti. Una vez descubierta, disimula preguntando; ¡ Ah !, ¿ es para ti ? La pregunta real es : ¿ qué dices qué queréis hacer en la casa? Situación no. 5. Después de muchos intentos has conseguido la licencia de manejar, pides el coche a tu padre y como que existe Dios y parece que tu 'Jefe" aprecia a los planchistas, decide dejártelo. Tomas las llaves y casi listo para salir, la madre pregunta; ¿ Verdad qué tendrás cuidado y serás prudente ? Esta vez, sí es sincera. Situación no. 6. (Otro acto). Conseguiste la licencia de manejo, pides el coche a tu padre y accede... Dios también ama a los planchistas y mecánicos. Tomas las llaves y la madre, que siempre sufre, quiere pedirte que tengas cuidado y que seas prudente pero, le parece obvio y nada te dice.... Pasan las horas y a las cuatro de la madrugada unos amigos llaman a tus padres desde el hospital diciendo que no se asusten, que el "coche" ha sufrido un accidente y que tú tienes seis costillas rotas y algunas magulladuras. Mamá no se lo perdonará nunca. Se sentirá culpable toda la vida. Pensará que si te hubiese hablado procurando que tuvieras cuidado, lo habrías tenido. Y... ¿Quién sabe si tiene razón ?.