• Crece a más no poder el delito y hoy por hoy la autoridad de cualquier nivel e instancia de gobierno, no ha asumido su deber de realizar búsquedas exhaustivas de las personas desaparecidas, investigar los hechos y llevar a quienes sean responsables ante la justicia, además de asegurar la reparación de los daños a numerosas familias de víctimas.
Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN, Méx., a 12 de mayo del 2016.- Del cruel estado de inseguridad que nos asiste, en donde el crimen ha rebasado por completo a las autoridades, no deja de preocupar esa notable percepción ciudadana, que aquí, es una total “Tierra de Fuego-una Tierra de Nadie”.
Naucalpan está descompuesto, se encuentra en un nivel de gravedad insoportable, en el que a diario, los olores fétidos a muerte, los sistemáticos asaltos en el transporte público de pasajeros, a transeúntes, negocios, a casa-habitación, y hoy por hoy, las desapariciones forzadas, vienen haciendo estragos a familias de cualquier nivel socio-económico.
Son realidades actuales, los datos extraoficiales con los de la joven Geraldine Daniela Orozco Terrones de 15 años de edad, desparecida el 6 de mayo en la colonia Mártires de Río Blanco, superan ya los 31 casos.
Los esfuerzos ineficaces o inexistentes realizados por algunas autoridades para encontrar a personas que fueron sustraídas potencian el sufrimiento de los familiares de las víctimas, para quienes no saber qué les sucedió a sus seres queridos provoca un desconsuelo constante.
Por desfortuna, muchos familiares postergan todos los demás aspectos de su vida y se dedican exclusivamente a buscar a las personas desaparecidas, una tarea que, según sienten, no pueden abandonar hasta saber la verdad-quieren saber de sus hijos y/o hijas, si están vivos o muertos.
Pese a lo anterior y más allá que ello, no existen dudas de que hay numerosos casos más y cuyo paradero aún se desconoce.
Lamentablemente, el asunto continúa siendo ignorado y se sabe que el creciente problema de las desapariciones, no se han adoptado medidas serias para abordarlo.
La situación, ha dado lugar a la crisis más profunda en materia de desapariciones forzadas que se haya producido en el municipio y prácticamente en todo el país.
Al parecer, no hay un plan integral y efectivo para investigar desapariciones ocurridas en el pasado y ayudar a prevenirlas en el futuro.
Los casos de desapariciones muy probablemente continuarán en ascenso. Y miles de familias de víctimas seguirán sumidas en la desesperación de no saber qué les sucedió a sus seres queridos.
Claro que las desapariciones afectan profundamente casi todos los aspectos de la vida de las familias de las víctimas.
Testimonios aseguran no saber qué había sucedido a sus seres queridos es una fuente inagotable de sufrimiento, que empeora ante los débiles esfuerzos de las autoridades por dar con su paradero.
En el estado de México, se reconoce un problema grave de desaparición de mujeres y, en muchos casos, las que aparecen fueron asesinadas, alertó el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio.
Por otra parte, Naucalpan también se ha convertido en un alarmante municipio vulnerable al registro de desapariciones de niñas y adolescentes, y que francamente irá en aumento.
Cabe hacer mención, que un total de 25 mil 648 desapariciones forzadas se han reportado en México durante los últimos 10 años, reveló con un estudio llevado a cabo por la Procuraduría General de Justicia (PGR), en septiembre de 2015.
Entre 2006 y 2015 se registraron 10 desaparecidos por día, la mayoría "en un contexto en el que el crimen organizado y la trata de personas están entre los principales motivos de la desgracia de miles de familias mexicanas", destaca.
“En la mayoría de las investigaciones las autoridades no parecen dispuestas a encontrar la verdad de lo ocurrido y, por lo general, las instancias oficiales muestran desinterés por resolver los casos”, agrega el informe.
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