En Toluca, Estado de México, la Secretaría de Finanzas tuvo relación con las diferentes asociaciones con dueños de bares y restaurantes, cámaras empresariales, incluso con algunas compañías, para analizar “cómo darle tratamiento al impuesto estatal sobre venta de bebidas alcohólicas, que quedó en 4.4 por ciento”.
Rodrigo Jarque Lira, titular de la dependencia comentó que el impuesto fue una propuesta del Partido del Trabajo (PT) y por ley este ordenamiento se debe publicar en la Gaceta de Gobierno, pues es un impuesto que aprobaron los diputados.
"Es un impuesto que inhibe el consumo de bebidas alcohólicas y por lo tanto tiene un beneficio para la sociedad", finalizó.
La aprobación de este impuesto ha causado preocupación en los propietarios de bares y restaurantes en la entidad, ya que consideran les restará competitividad.
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