Portando globos blancos, madres y padres de familia, cerraron la vialidad para exigir la remodelación del plantel que desde el sismo de septiembre de 2017, tuvo serias afectaciones.
Por lo que señalaron que a más de un año, las autoridades no han atendido la situación del preescolar, cuyos alumnos se encuentran en riesgo por las pésimas condiciones del edificio.
El bloqueo provocó severos asentamientos, obligando a la gente a bajar del transporte público para caminar hasta llegar a la estación del metro.
Posteriormente llegó personal del gobierno municipal, elementos de Seguridad Ciudadana y de la Secretaría de seguridad del Estado de México (SS), quienes previo al diálogo, convencieron a los protestantes de que abrieran el carril confinado del Mexibús.
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