* Recibe la entidad mexiquense programa de Regionalización de Alto Rendimiento, Torneo Nacional y Copa Edoméx de la especialidad.
* Participan 3 mil 500 deportistas durante los días de actividad.
Zinacantepec, Estado de México, junio de 2022. Con la participación de 3 mil 500 taekwondoínes, el Estado de México vivió cinco días de intensa actividad deportiva, con el desarrollo del programa de Regionalización de Alto Rendimiento, el Torneo de Ranking Nacional y la Copa de Taekwondo Estado de México, en la Ciudad Deportiva Edoméx en Zinacantepec.
La presidenta de la Asociación del Estado de México, Emily Armas Aranda, detalló que el programa de Regionalización arrancó con un campamento al que acudieron 500 taekwondoínes, el cual es una estrategia de la Federación Mexicana de Taekwondo, con la que se busca llegar a las diferentes regiones para encontrar talentos, ya que, debido a la alta competencia en todo el país, hay muchos deportistas que cuentan con el somatotipo ideal para este deporte y que por falta de poder afinar la técnica o táctica, se quedan en los selectivos estatales y no terminan proyectándose.
Es por ello que con este proyecto se pretende detectar a estos talentos, para pulirlos y que puedan aspirar a la selección nacional.
La siguiente etapa fue el Torneo de Ranking G3, en el que además de participar deportistas de la región, asisten competidores procedentes de todo el país, como parte de su proceso de preparación, por lo que se mostró un excelente nivel en todas las categorías y divisiones, gracias a la calidad de los mil competidores inscritos.
Para cerrar las actividades se efectuó la Copa Estado de México, con la intención de “ponerles el escenario, que es de un evento nacional, para que los papás también se motiven, que los niños vivan la experiencia, el escenario, los jueces, las pantallas, la transmisión en vivo; que vivan todo lo que se vive en los grandes eventos nacionales”, declaró Emily Armas.
Finalmente, la presidenta de la Asociación señaló que con las preseas entregadas, los ganadores pudieron tener un recuerdo tangible de su estancia deportiva en el Estado de México y la gran riqueza cultural que tiene la entidad, por lo que en ella se plasmaron elementos como El hombre sol, el Acueducto del Padre Tembleque, el ex convento de Tepotzotlán, el Nevado de Toluca y las pirámides de Teotihuacán.
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