martes, 14 de enero de 2014
España: Quinta jornada de protestas a pie de calle
REUTERS Ricardo Ordonez
Los vecinos de la ciudad española de Burgos han vuelto a concentrarse en la calle Vitoria para impedir que entren las máquinas y el personal de las constructoras y evitar así que la transforman en un bulevar, lo que eliminaría plazas de aparcamiento.
Se trata del quinto día consecutivo de protestas. Tras la movilización del lunes, en la que participaron unas 5.000 personas, según la asamblea de vecinos, se repitieron los incidentes que en los últimos días se han saldado con 40 detenidos y varios heridos. Dos de los detenidos han ingresado en prisión esta mañana por orden del Juzgado de Instrucción número 3 de Burgos.
AFP Cesar Manso
Policías antidisturbios y manifestantes protagonizaron carreras por la zona después de que algunos de los participantes en la protesta arrojaran piedras contra los agentes.
REUTERS Ricardo Ordonez
Algunos de los manifestantes más radicales quemaron una caseta de obras de la empresa adjudicataria de los trabajos de construcción del aparcamiento subterráneo que forma parte del bulevar que se proyecta y varios contenedores. Además, volvieron a golpear las lunas, ya rotas en días anteriores, de varias sucursales y entidades bancarias situadas en ese tramo de la calle Vitoria.
AFP Cesar Manso
El periodista español Gumersindo Lafuente comenta a RT que todos estos hechos se desarrollan "en un escenario en el que tenemos un Gobierno cada vez más autoritario; y no solo un Gobierno, sino un estilo de clase de política (…) independientemente de la ideología del partido al que pertenezca". A su juicio, los planes de la Alcaldía no van a poder llevarse a su fin tal y como estaban planteados. "La Alcaldía de Burgos tendrá que bajar a la calle y dialogar con los vecinos. No se puede imponer a unos vecinos una solución que ellos no quieren, porque los vecinos no solo son dueños de sus casas, sino que comparten un espacio común y no se les pueden imponer cambios radicales", opina.
Los vecinos se oponen a que se transforme en bulevar un tramo de unos 800 metros de la calle Vitoria de la capital burgalesa, una de las arterias principales de Burgos, que une el barrio de Gamonal con el centro de la ciudad, en lo que antes era parte de la carretera N-I y hoy es un tramo urbano. Las marchas se desarrollan bajo el lema "El pueblo unido jamás será vencido" y "La calle es de Burgos y no Burgos de Lacalle" (en referencia al alcalde de la ciudad).
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