La opinión de... Salvador Ferrer i Paradeda

Un día para meditar…. Salvador Ferrer i Paradeda.

¿El mundo está harto de nosotros?. Es una pregunta que me hago a tenor que todo lo que está sucediendo y la inconformidad que la “gente normal” expresa en multitud de países. Los iluminatis de turno han tomado posesión de las poltronas y no quieren ceder, como respuesta, el ciudadano de a pie les contesta que están “hasta la madre”, o lo que es lo mismo, los cataplines ya no tienen acomodo en ningún lugar, exigen soluciones y si han de rodar cabezas, rodarán pese a quien pese. Ni son políticas sociales ni se acercan a una lógica, aunque fuera intermitente, los gobiernos han cerrado el cerco para poder controlar y decidir, mantener su estatus y no bajar ni un peldaño. Por el contrario, aquellos que hoy se sitúan en el escalón inferior inmediato, dicen que no van a dar un paso más a menos que las cosas tomen el lugar adecuado y se dejen de monsergas –embrollos, fárragos, enredos- porque ya no pueden perder más, puesto que nada tienen. Llegando a este punto, es más fácil un encuentro a tortazos que un apretón de manos y quítame esas penas. El mundo no nos quiere mientras no miremos al mundo, mientras no respetemos al mundo y mientras no pisemos al mundo como algo prestado, porque estamos aquí de prestados y después de unos años…. ¡Pum!, desaparecemos de la faz de la tierra y a veces ni el recuerdo queda. La mejor respuesta a lo que sucede es un giro total y una mano negra que haga desaparecer a “iluminatis y pandejos, que como dije un día, es el producto de una osa panda y un conejo. No hagamos como los avestruces esos, que esconden la cabeza debajo la tierra cuando tienen problemas, hay que afrontar las realidades y poner un ¡hasta aquí!, ni un paso más sin respuestas y ni un paso atrás ante las amenazas. Vivimos en un mundo que está harto de nosotros y puede echarnos para siempre de sus dominios, solamente falta una pequeña chispa, una chispa mordaz, ligera, contundente y altanera si se quiere. Cambiemos al mundo por un mundo diferente, cambiemos el pensamiento por un pensamiento libre y cambiemos a quienes se creen intocables por una manada de burros cojos, sea como sea, lo harán mejor. ¡¡¡Mundo!!! No te olvides de los que te queremos.