Bullying: los niños reflejan lo que viven en casa

Redacción Revolución 3.0 / Las diferencias y la falta de autoestima por parte de los padres de familia son los principales causantes del acoso escolar o bullying, sin embargo, no todo queda en el acecho de la víctima, sino que va hasta los golpes e incluso provocar un accidente que derive en la muerte, como ya se han manifestado múltiples casos alrededor de la república mexicana.

María Teresa Prieto, investigador del Centro Universitario de Ciencias Económica Administrativas (CUCEA) y especialista en violencia y conductas disruptivas, sostiene que tanto los padres como los maestros deben recibir capacitación para saber cuáles son las conductas cotidianas en los infantes que no pueden verse “como normales”. Prieto dice al respecto: “La violencia genera violencia y algunos grupos tienen ciertas formas de ‘iniciación’ de los compañeros que son agresivas, o muchos niños y adolescentes no conocen otra forma de relacionarse que la violencia. Ellos reflejan en la escuela lo que están viviendo en casa, pero muchos profesores tienen la idea de que están ahí solo para educar y no para intervenir en casos violentos”. El último evento registrado fue en Tamaulipas donde un niño fue mecido por cuatro de sus compañeros. Posteriormente lo lanzaron contra una pared y su cabeza se impactó, por lo cual fue trasladado al hospital. Una vez que pasaron tres días, el niño murió por traumatismo craneoencefálico a raíz del golpe. Pero no es el único, también ya han cobrado víctimas los estados de Zacatecas y Puebla, así como las más de 900 denuncias recibidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) durante los últimos siete años. Además, cabe resaltar, esta tarde la Comisión urgió a las autoridades mexicanas para que se legisle en contra del llamado Bullying. Ante los casos más recientes y las cifras oficiales, la también académica de la Universidad de Guadalajara afirmó que urgen políticas públicas con el fin de crear estrategia de intervención entre papás, directivos, profesores y niños, ya que, según señala, mucha de la responsabilidad recae en los profesores, quienes en variadas ocasiones no se meten “no porque no quieran, sino porque no saben cómo hacerlo”. Y si bien la Secretaría de Educación Pública (SEP) lanzó un programa piloto contra los agresores y las víctimas, la especialista apunta que la estrategia del gobierno debe contemplar los diversos estudios dela academia y la ciencia, pues “el bullying es un problema multifactorial, pero que atenta contra los derechos humanos de las personas y afecta su autoestima. Por eso, debe abordarse de forma integral, no sólo atendiendo a las víctimas. Deben de involucrarse directivos, terapeutas, psicólogos, las familias y las instituciones de gobierno, para que instrumenten las estrategias necesarias”.