El EI asesina y arroja a un pozo a 50 miembros del clan suní rival

EFE en Bagdad | El grupo yihadista Estado Islámico (EI) perpetró ayer una nueva ejecución masiva, al matar a sangre fría en el oeste de Irak a cien miembros del clan tribal suní Albunamr, con lo que se elevan a 322 los asesinatos registrados en los últimos días en circunstancias similares. La mayoría de las víctimas murió por disparos de bala y otras fueron decapitadas con espadas, según Al Kaud, quien agregó que entre los fallecidos también hay efectivos de las fuerzas de seguridad y milicianos. Según las autoridades de Bagdad, más de cincuenta cadáveres —entre ellos, de niños y mujeres— fueron hallados en un pozo de agua. Además, el EI mantiene secuestrados a al menos 65 miembros de esa tribu, a los que considera “prisioneros de guerra” y a los que acusa de colaborar con el Gobierno iraquí y de combatir a su lado en Al Anbar. Los terroristas, que saquearon ganado y propiedades del clan, acusan a los Albunamr de unirse a los Consejos de Salvación (milicias suníes progubernamentales). El Gobierno iraquí condenado las últimas ejecuciones y amenazó con responder con fuerza, mientras que Estados Unidos, que lidera una coalición internacional para combatir a los yihadistas, mostró su repulsa por esos actos.