• Nadie ha crecido en términos de votos, y se estima de quien gane, lo hará con las estructuras territoriales que por años han conservado.
• Cada partido político y candidatos blindan sus correspondientes distritos de confort, pero no obstante se presumen de numerosas sorpresas.
Por Mario Ruiz Hernández
Con la misma intensidad que candidatos a la alcaldía de Naucalpan salen a la calle a ganarse las simpatías y sobre todo el voto, de igual forma las distintas planillas a contender por los distintos cargos públicos en el ayuntamiento, la legislatura mexiquense y el congreso de la unión.
Hasta el momento, lo hemos venido comunicando que, esta justa electiva programada para el domingo 7 de junio, francamente que es de tierra.
Atrás seguramente quedarán los buenos deseos y propósitos, ahora es lograr que se ve complicado, la credibilidad y confianza de los postulantes y el partido que representan.
La tarea en verdad que no está nada fácil para nadie, y quiérase o no, la caída de popularidad del presidente, Enrique Peña Nieto, al menos en los priístas les viene calando hondo en sus objetivos.
En el Naucalpan de hoy, la apuesta es difícil si consideramos que múltiples estratos sociales aún y se encuentran en la indefinición y persiste una especie de continuismo político en las estructuras territoriales, mejor conocidas y/o denominadas piso básico y hasta concebidas como “Voto Duro”.
Evidentemente, apreciamos que no existe un crecimiento considerable en la partidocrasia, y es real que la movilidad en “las células callejeras”, de alguna u otra forma, son las equivalentes de siempre.
Sin embargo, la operación política y la promoción de candidaturas juegan una parte importante, y en eso creo que les queda claro a los abanderados del PRI, PAN, PRD, MORENA, y Movimiento Ciudadano, entre otras cinco opciones más.
Empero sin desmeritar a nadie y de manera respetuosa, la cruzada cívica será definida en la renovación de la presidencia municipal entre el candidato de la coalición del PRI, PVEM y PANAL, David Parra Sánchez, el del PAN, Edgar Olvera Higuera y Martín Riestra del PRD, al margen de lo que pueda hacer Yeidckol Polewsky de MORENA, y Eduardo Melo de MC.
Aunado a ello, en las ventajas en puntos porcentuales que conserva Parra Sánchez de al menos 18 puntos sobre Olvera Higuera, y poco más de 25 puntos del abanderado del PRD.
Por otra parte, en lo que corresponde a los diputados locales en el 29, quizá Irazema González Martínez Olivares, pueda conservar la curul para el tricolor, no obstante el entusiasmo de la aspirante del Partido del Sol Azteca, Esther Tapia Vázquez, y más lejana la posibilidad de Raymundo Garza del PAN, y en total riesgo, Rosalba Gualito Castañeda, versus Víctor Gálvez Astorga “El Pompis” del albiazul en el 30, y lo poco o mucho que consiga, Porfirio Durán Reveles, en el PRD.
Visto de esta manera, en el mapa geográfico federal, en el distrito 21, ya decíamos anteriormente, que el líder del Movimiento Antibache Naucalpense Organizado (MANO), Antonio Arzate, se encuentra propenso a dar la sorpresa a favor del PRD, y en una votación muy cerrada, más allá de la zona residencial, Dafne Mendieta Carrola del PRI, iría a la alza, aparejadamente con Luis Marrón Agustín, candidato albiceleste.
En el distrito 22, Enrique Francesco Jacob García, del tricolor continúa cuesta arriba, mientras que Angélica Moya Marín del PAN, al parecer no ha despegado como quisiera, en tanto que Luis Vega, postulante del PRD, va a la competencia sumamente lento.
A su vez, en el distrito 24, la situación está que arde y se presume de un pronóstico de reserva, en el cual nuestra hipótesis de que el “voto priísta” está pulverizándose por los abanderados de oposición, y también ex del tricolor, no se despeja todavía de manera clara, y los referentes hablan del encendido de los “focos rojos”, al ex alcalde, David R. Sánchez Guevara, y la escalonada de Antonio García Mendoza del PAN, además de la pausada promoción de Antonio Lara Vázquez del PRD, que advierte de sinnúmero de riesgos al Revolucionario Institucional.
El asunto, versa de que sí la campaña de Sánchez Guevara, se va en caída libre y con ello un eventual descalabro, la elección entre priístas y panistas a la alcaldía de “La Joya de la Corona” se definiría en los tribunales, al no lograr una victoria, contundente, legítima y clara.
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