• Este el testimonio de uno de tantos asaltantes de usuarios del transporte público de pasajeros, aquí en Naucalpan y en municipios conurbados a la ciudad de México.
• La verdad que asesinan a “sangre fría” a pasajeros que se resisten al atraco, además de que sean pues, los muchachitos todavía más sanguinarios que los adultos…
Por Mario Ruiz Hernández
“Tienes que gritar ¡Esto es un asalto cabrones!, para que espantes a los pasajeros”, fue una de las primeras lecciones que aprendió Miguel, quien a los 14 años de edad, empezó a robar en camiones y microbuses del estado de México.
“Entre más fuerte grites y si es necesario suelta dos tiros, uno al techo y otro al piso, para que espantes más al pasaje y te sueltan más fácil el dinero, celulares y joyas”, escuchó Miguel, en sus primeras lecciones de su maestro el “Manos largas”.
Como un perro que trata de controlar a su presa, el ladrón grita y escupe su ira hacia el pasaje, en una descarga de adrenalina que paraliza a la víctima quien sólo escucha palabras humillantes como “¡Pendejo, no te quieras pasar de listo!”.
“Me vale madres, si me los trueno, al cabo El Reclusorio Norte (EL RENO), me espera y no tengo miedo de caer otras vez, así es que o se tranquilizan a les pegó un tiro”, son la palabras de los asaltantes.
En nuestro entorno, claro que más de uno ha sido víctima, y a pocos pasos del propio palacio municipal de Naucalpan, y en las arterias internas que atraviesan la demarcación, ya este tipo de delito es tan normal que, como si no pasará nada, miles de usuarios van con “El Jesús en la boca”, y decirlo como es- el viajar en el transporte público en estos momentos es un total riesgo-
A diario, en las vialidades de la Luis Donaldo Colosio, el famoso puente de Loma Linda; la Calzada de Los Maestros, la denominada ruta de San Bartolo-a Loma Colorada, la vía Adolfo López Mateos; el puente del Hospital San Rafael, la Avenida Lomas Verdes, y periférico norte en ambos sentidos, el atraco en ruteros y combis, da cuenta de ese instante de justamente adrenalina pura.
Pero no digamos lo crucial, en las vialidades del Molinito, San Antonio Zomeyucan, Avenida de los Maestros rumbo a Valle Dorado, Río Hondo, “la Cañada”, Benito Juárez y las Manchas, los registros son alarmantes.
Lugares que en la noche o muy de mañana, es preferible el uso del taxi y pagar más que perder la vida súbitamente por estos jóvenes criminales en potencia.
Los registros en la demarcación, son incalculables, debido a que pocos son los que denuncian y los que llegan a saberse, es porque en la unidad “resultó un muertito” y necesitan del auxilio.
Hace tres años atrás, en todo el país, el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) registró un total de 3 mil 16 robos con violencia a transportistas; mil 278 de ellos en la entidad mexiquense, y se estima que las cifras al 2015 han sido duplicadas.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad Ciudadana en la entidad, cuenta con las fichas de poco más 2 mil 168 ladrones que asaltan pasajeros en combis, microbuses y camiones del estado de México.
Menores ladrones
De las 2 mil 168 “currículas” de "asalta pasajeros" que operan en el estado de México, donde se incluye el nombre, apodos, algunas fotos, rasgos físicos y tatuajes, el 17% son mujeres y 15% son menores de edad, porcentaje que se incrementó en los últimos años, pues antes sólo 5% eran adolescentes y niños, afirman fuentes oficiales.
Algunos actúan solos, pero la mayoría “trabaja” en parejas y tríos, aunque hay casos de más personas, quienes asesinan a “sangre fría” a pasajeros que se resisten al asalto, además de que sean pues, los muchachitos todavía más sanguinarios que los adultos
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