En el Estado de México, se localiza el 20% de las extorciones que se denuncian; la presión de la delincuencia organizada y la impunidad afectan la cadena de un negocio, desde el dueño hasta los empleados.
El dueño de un establecimiento que fue víctima comentó; "más de 20 hombres llegan juntos a uno de los antros más concurridos a mediados del mes de septiembre, nosotros pensamos que venían como clientes hasta que nos percatamos que venían armados”.
Mientras que otros empresarios dueños de establecimientos, aceptaron pagar cuotas a cárteles distintos y que incluso rechazaron entrevistas por temor, coincidieron en que denunciar en el Estado de México no es una opción ante el alcance del crimen organizado.
La Fiscalía del Estado de México dió inicio a una investigación; hasta el momento no hay detenidos por el caso.
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