• En el PRI, David Parra mantiene un grado importante de posicionamiento, frente a cualquiera de sus adversarios políticos que le quieran poner, en el supuesto de una virtual candidatura, incluso con los de su propio partido.
Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN Méx., a 20 de noviembre del 2017.- En todo momento se ha dicho que la mejor encuesta en los procesos electorales son definitivamente las urnas.
En ese orden, es por demás insistir en las primeras aproximaciones de lo que pueden o no, lograr partidos políticos y candidatos en el posicionamiento ciudadano.
Para el caso de Naucalpan, los números prácticamente son fríos y el partido de Andrés Manuel López Obrador, morena, está ubicado en los primeros lugares en las preferencias del electorado
Lo anterior, de acuerdo a la elección de gobernador del estado de México, seguido del PRI, PAN y PRD, al margen de lo que representaría la elección del 2018, particularmente a ayuntamiento.
En las mediciones correspondientes, las presunciones son de una competencia sumamente cerrada entre las distintas fuerzas político-electorales, definitivamente en coalición.
Bajo esa lógica, habría que confrontar a los distintos candidatos formales a contender a la alcaldía y que aún y no salen a la luz pública, derivados de los procesos de selección.
Claro que en la demarcación se tienen figuras indescartables en cualquier escenario, y una de ellas es el líder priísta, David Parra Sánchez, y otras consideradas naturales, entre los que destacan los panistas, Iván Arturo Rodríguez y el diputado federal, Luis Marrón Agustín.
Referir que, toda proyección al momento habrá que verla de manera cuidadosa y responsable, y más cuando se trata de confrontar a quienes anhelan y “sueñan gobernar Naucalpan”.
Parra Sánchez sin duda, mantiene una permanencia importante de trabajo en el tiempo con cargo o sin cargo público, lo que lo coloca en un rival competitivo y sumamente fuerte.
Por otra parte y al analizar el factor “traición que volviera a repetirse al ayuntamiento”, por aquellas diferencias irreconciliables que todos conocemos, es evidente tal riesgo a dilucidar.
En las proyecciones que se estiman, destacar que esta situación le restaría al menos cinco puntos porcentuales, que viene arrastrando con el PAN y posiblemente con morena.
Es decir, en ambos escenarios en el que poco o mucho pueda el “grupo de los innombrables” inclinar la balanza, quizá lo mismo con la coalición del Frente Ciudadano por México; PAN, PRD y MC, que por morena, al alto grado de promiscuidad política que es ya notable.
Cierto es, que Parra está posicionado en las comunidades, producto de más de 40 años de labor ininterrumpida, que cualquier otro pudiera tener, incluso con sus propios pares de su partido, Rodrigo Reina Liceaga, o Enrique Jacob Rocha y/a quien le pongan.
Finalmente, con las postulantes de morena, la distancia es abismal, frente a María Isabel Álvarez y Duncan, Lorena Río de Laloza Robles y Carmen Abigal Ruiz Cutiño, en el que la situación más que la propuesta por Naucalpan y su Renacimiento, la apuesta va encaminada al hartazgo, “el encabronamiento ciudadano”, el voto Anti-PRI, y el efecto AMLO, como en 2006.
NAUCALPAN Méx., a 20 de noviembre del 2017.- En todo momento se ha dicho que la mejor encuesta en los procesos electorales son definitivamente las urnas.
En ese orden, es por demás insistir en las primeras aproximaciones de lo que pueden o no, lograr partidos políticos y candidatos en el posicionamiento ciudadano.
Para el caso de Naucalpan, los números prácticamente son fríos y el partido de Andrés Manuel López Obrador, morena, está ubicado en los primeros lugares en las preferencias del electorado
Lo anterior, de acuerdo a la elección de gobernador del estado de México, seguido del PRI, PAN y PRD, al margen de lo que representaría la elección del 2018, particularmente a ayuntamiento.
En las mediciones correspondientes, las presunciones son de una competencia sumamente cerrada entre las distintas fuerzas político-electorales, definitivamente en coalición.
Bajo esa lógica, habría que confrontar a los distintos candidatos formales a contender a la alcaldía y que aún y no salen a la luz pública, derivados de los procesos de selección.
Claro que en la demarcación se tienen figuras indescartables en cualquier escenario, y una de ellas es el líder priísta, David Parra Sánchez, y otras consideradas naturales, entre los que destacan los panistas, Iván Arturo Rodríguez y el diputado federal, Luis Marrón Agustín.
Referir que, toda proyección al momento habrá que verla de manera cuidadosa y responsable, y más cuando se trata de confrontar a quienes anhelan y “sueñan gobernar Naucalpan”.
Parra Sánchez sin duda, mantiene una permanencia importante de trabajo en el tiempo con cargo o sin cargo público, lo que lo coloca en un rival competitivo y sumamente fuerte.
Por otra parte y al analizar el factor “traición que volviera a repetirse al ayuntamiento”, por aquellas diferencias irreconciliables que todos conocemos, es evidente tal riesgo a dilucidar.
En las proyecciones que se estiman, destacar que esta situación le restaría al menos cinco puntos porcentuales, que viene arrastrando con el PAN y posiblemente con morena.
Es decir, en ambos escenarios en el que poco o mucho pueda el “grupo de los innombrables” inclinar la balanza, quizá lo mismo con la coalición del Frente Ciudadano por México; PAN, PRD y MC, que por morena, al alto grado de promiscuidad política que es ya notable.
Cierto es, que Parra está posicionado en las comunidades, producto de más de 40 años de labor ininterrumpida, que cualquier otro pudiera tener, incluso con sus propios pares de su partido, Rodrigo Reina Liceaga, o Enrique Jacob Rocha y/a quien le pongan.
Finalmente, con las postulantes de morena, la distancia es abismal, frente a María Isabel Álvarez y Duncan, Lorena Río de Laloza Robles y Carmen Abigal Ruiz Cutiño, en el que la situación más que la propuesta por Naucalpan y su Renacimiento, la apuesta va encaminada al hartazgo, “el encabronamiento ciudadano”, el voto Anti-PRI, y el efecto AMLO, como en 2006.
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