• Ediles neomorenistas y morenistas “pintan su raya” en tan controversial asunto.
Por Mario Ruiz Hernández
NAUCALPAN Méx., a 29 de marzo del 2019.- Evidentemente que, con la abolición del exhorto para que los Registros Civiles del municipio de Naucalpan celebren Matrimonios Igualitarios, es claro que la negativa dejó muchas “heridas abiertas”.
Asimismo, y quizá vayamos al fondo del asunto, y todavía más allá de la determinación en cabildo, inferir en la ironía, del “divorcio o pinta de raya”, entre neomorenistas y morenistas.
En el “choque ideológico” y seguramente de otros tantos que habrá en la agenda nacional, estatal y municipal, definir al final, ese gobierno hibrido que se tiene de entre “tantas mezclas partidistas”.
Francamente y en el orden de ideas respectivo, lograr o establecer de forma terminante el tipo de precisamente gobierno, pese a que se sabe que no hay un gobierno ideológicamente neutro y cuando se gobierna, se supone que se hace con los principios del partido que los llevó al poder.
Sin embargo, en el asunto que más bien es de procedimiento jurídico y de las atribuciones y competencias, salieron en la asamblea, los genuinos y auténticos rostros de los ediles.
De igual manera, su nivel de debate, el perfil y la otra personalidad inimaginablemente que estuviera presente al sorprender al ego, a ese culto a la intelectualidad y que no es más que el otro.
No obstante, y en la adjudicación de la presumible “traición de esa sangre azul que corre en las venas de la alcaldesa, Patricia Elisa Durán Reveles, al voto contrario, qué esperar en la coyuntura.
En contraste y al airado reclamo del síndico académico, Max Alexander Rábago y el regidor Rodrigo Gómez Orta, de no acompañarlos en este tema, de ser “candidata de izquierda, pero votar y actuar hacia la derecha”, además de la visión de otros ediles, el fijar de entrada las posiciones.
Pero a la vez, definir entre el órgano de gobierno, las nuevas alianzas válidas o no, a propósito de dar salida a los asuntos de la mayor controversia en inusitado cabildeo.
Por otra parte, destacar quiérase o no también, ese arte de la negociación política y lograr las afinidades, en un capítulo de origen controversial, como lo es el matrimonio igualitario.
Insistir y no dejar de insistir que el proyecto a través de un exhorto, y su resolución en el cabildo, no es contra de los derechos humanos, al respeto a la igualdad y la diversidad, sino por procedimiento.
Recalcar que, el ayuntamiento no es la instancia jurisdiccional para tales efectos, y todavía esperar la iniciativa de Reforma Constitucional que ya está en “la cancha” del Congreso Mexiquense.
NAUCALPAN Méx., a 29 de marzo del 2019.- Evidentemente que, con la abolición del exhorto para que los Registros Civiles del municipio de Naucalpan celebren Matrimonios Igualitarios, es claro que la negativa dejó muchas “heridas abiertas”.
Asimismo, y quizá vayamos al fondo del asunto, y todavía más allá de la determinación en cabildo, inferir en la ironía, del “divorcio o pinta de raya”, entre neomorenistas y morenistas.
En el “choque ideológico” y seguramente de otros tantos que habrá en la agenda nacional, estatal y municipal, definir al final, ese gobierno hibrido que se tiene de entre “tantas mezclas partidistas”.
Francamente y en el orden de ideas respectivo, lograr o establecer de forma terminante el tipo de precisamente gobierno, pese a que se sabe que no hay un gobierno ideológicamente neutro y cuando se gobierna, se supone que se hace con los principios del partido que los llevó al poder.
Sin embargo, en el asunto que más bien es de procedimiento jurídico y de las atribuciones y competencias, salieron en la asamblea, los genuinos y auténticos rostros de los ediles.
De igual manera, su nivel de debate, el perfil y la otra personalidad inimaginablemente que estuviera presente al sorprender al ego, a ese culto a la intelectualidad y que no es más que el otro.
No obstante, y en la adjudicación de la presumible “traición de esa sangre azul que corre en las venas de la alcaldesa, Patricia Elisa Durán Reveles, al voto contrario, qué esperar en la coyuntura.
En contraste y al airado reclamo del síndico académico, Max Alexander Rábago y el regidor Rodrigo Gómez Orta, de no acompañarlos en este tema, de ser “candidata de izquierda, pero votar y actuar hacia la derecha”, además de la visión de otros ediles, el fijar de entrada las posiciones.
Pero a la vez, definir entre el órgano de gobierno, las nuevas alianzas válidas o no, a propósito de dar salida a los asuntos de la mayor controversia en inusitado cabildeo.
Por otra parte, destacar quiérase o no también, ese arte de la negociación política y lograr las afinidades, en un capítulo de origen controversial, como lo es el matrimonio igualitario.
Insistir y no dejar de insistir que el proyecto a través de un exhorto, y su resolución en el cabildo, no es contra de los derechos humanos, al respeto a la igualdad y la diversidad, sino por procedimiento.
Recalcar que, el ayuntamiento no es la instancia jurisdiccional para tales efectos, y todavía esperar la iniciativa de Reforma Constitucional que ya está en “la cancha” del Congreso Mexiquense.
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