• El gobierno municipal se ha convertido en el principal adversario del sector productivo, del comercio y los servicios, en el que lugar de facilitar las inversiones, las aleja.
• Empresarios revelaron el alto costo que implica obtener el Dictamen Único de Factibilidad (DUC), y que es un trámite que oscila entre los 100 mil al millón o millón y medio por obtenerlo.
Por Mario Ruiz Hernández
VALLE DE MEXICO., a 11 de mayo del 2022.- A bajo presión operan las distintas unidades económicas en el municipio de Coacalco, que preside el alcalde priísta, David Sánchez Isidoro.
Las quejas son una constante, y trascendió que diversos negocios son practica y “presumiblemente timados” por propias autoridades locales, a quienes exigen cantidades de dinero excesivos.
Lo anterior, y para poder operar y trabajar de manera libre, aún y contando con sus licencias de funcionamiento y documentación en regla.
Empresarios y prestadores de servicios que omitieron dar sus nombres por ciertas represalias, revelaron que los montos superan los 100 mil hasta el millón o millón y medio de pesos.
En Coacalco todos deben pasar con su “cuota” o presuntamente el pago de derechos, desde una miscelánea, taquería, licorerías y tienditas, así como incluso, centros de diversión o entretenimiento.
De igual forma, discotecas, chelerías, restaurantes, cocinas económicas y otros giros a previsiblemente regularizar u ordenar por disposición oficial.
La oficina “acosadora” dirigida por Sergio Iván García Madrid, director de Desarrollo Urbano, y su subdirector, Gabriel Reyes, vienen de plano, “sangrando a todos”, y si no les cumplen, son amenazados de cerrarles sus negocios.
Lo peor, es que el munícipe Sánchez Isidoro, los envía con estos funcionarios a que “se arreglen” con ellos, y poder funcionar después de pagar o liquidar lo que les piden en “plata”.
Por otra parte, la enorme irresponsabilidad de casi casi “vender los Dictámenes Únicos de Factibilidad DUF”, en lugar de permitirles realizar el trámite correspondiente y sin ningún tipo de trabas, facilitando las inversiones en el Municipio de Coacalco, caracterizado por su gran dinamismo comercial.
El asunto delicado, en el que empresarios comunican de estar hartos de tanta “tramitología innecesaria”, y el pago de derechos para adquirir el presunto “DUF municipal” que oscila y llega a costar hasta millón y medio de pesos, o medir el negocio del según “El sapo es la pedrada”.
Los problemas crecen cada día más, debido a que los principales adversarios del sector productivo, el comercio y los servicios, es la propia autoridad municipal que, además de que a diario “atracan”, andan ya pensando en estos cinco meses de gestión, en la relección inmediata o consecutiva.
Finalmente, sólo recordarle el como llegaron, en una elección que se judicializó y que fueron los tribunales más que “los votos”, los que les dieron el triunfo electoral, a base de tanto alegato.
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