Proceso de paz en Colombia debe incluir a víctimas: Almudena Bernabeu

BOGOTÁ, Colombia.- Si las víctimas son excluidas de la negociación, el proceso de paz puede fracasar y dar paso a la impunidad, afirmó Almudena Bernabéu, experta en justicia universal, que además ha representado ante los tribunales de Estados Unidos a las víctimas de los jefes paramilitares extraditados a ese país por decisión del expresidente Álvaro Uribe. Bernabéu mostró su preocupación por la progresiva desaparición del principio de justicia universal y señaló que las leyes que se promulguen en un eventual postconflicto deberán incluir derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación, así como la restitución de tierras.

“Tengo mucha esperanza con el actual proceso de paz entre el gobierno colombiano y las FARC, pero hay que dotarlo de contenido jurídico”, le expresó la jurista española y experta en Justicia, Almudena Bernabéu a Baltasar Garzón, director de Hablemos de Paz y Derechos Humanos de Canal Capital. Bernabéu, que en los últimos veinte años se ha ocupado desde el Derecho en la defensa de las víctimas de crímenes de lesa humanidad, sostiene que cualquier negociación de paz será fallida si se excluye a las víctimas. En el caso colombiano, “hay que escucharlas ahora y saber qué mecanismos de justicia están dispuestas a valorar y legitimar. No necesariamente todas las víctimas querrán llevar sus casos ante los tribunales, impartir justicia no es solo castigar penalmente. Los gobernantes serían más eficaces si entendieran que las víctimas son personas con derechos”, enfatizó. La abogada de Valencia, premio Scevola “de la ética y la calidad de los profesionales del Derecho”, ha trabajado en casos como el del juicio contra Efraín Ríos Montt, exdictador guatemalteco, y el asesinato de seis sacerdotes jesuitas en El Salvador ocurrida en 1989. La prestigiosa jurista se mostró a favor de una amnistía para los victimarios, siempre y cuando sea transitoria e imprescindible para llegar a ciertos acuerdos. Sin embargo, a su juicio, es necesario encontrar una fórmula en la que haya algún tipo de sanción y de reconocimiento de la responsabilidad de las FARC en el conflicto (Ver documental). “Hay una clara diferencia entre leyes de amnistía y leyes de impunidad. Cuando quienes legislan son quienes detentan el poder para garantizarse la seguridad de seguir siendo la élite, se producen leyes de punto final. En el caso de leyes de amnistía, estas no implican que se prescinda de la justicia penal”, afirmó. Desde 2008, conoce de cerca el caso colombiano. Bernabéu fue consultada por abogados colombianos sobre las posibilidades jurídicas para que los jefes paramilitares extraditados a EEUU durante el gobierno del expresidente Álvaro Uribe por el delito de narcotráfico fueran juzgados por crímenes de lesa humanidad cometidos en Colombia. La jurista es directora del Programa de Justicia Transicional del Centro para la Justicia y la Responsabilidad (CJA, por sus siglas en inglés) con sede en San Francisco (EEUU) y se ha destacado por su compromiso con el principio de jurisdicción universal, por el cual una víctima, independientemente de su lugar de nacimiento y residencia, puede exigir el respeto a sus derechos humanos. La extradición de paramilitares Bernabéu sabía muy poco sobre Colombia, hasta cuando le fue solicitado un concepto sobre casos de paramilitarismo. La abogada, la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ) y el Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (CAJAR), interpusieron ante un tribunal estadounidense una demanda contra el paramilitar Carlos Mario Jiménez alias “Macaco”, jefe del Bloque Central Bolívar. El recurso fue presentado en nombre de las familias de la abogada cartagenera Alma Rosa Jaramillo y el líder campesino de San Pablo (Sur de Bolívar) Eduardo Estrada, asesinados por órdenes de Jiménez. En primicia a Hablemos de Paz y Derechos Humanos de Canal Capital, Bernabéu reveló que la demanda prosperó y el caso se abrió luego de estar archivado durante dos años. Hace tres semanas en una corte de Florida se celebró una audiencia en la que el juez escuchó los argumentos de las víctimas y del acusado. “Será interesante porque alias ‘Macaco’ quiere utilizar su participación en Justicia y Paz para atenuar su responsabilidad y evitar la demanda civil”, indicó. Respecto a la Ley de Justicia y Paz, por la cual se impusieron penas de cárcel de hasta ocho años a los máximos responsables de los grupos paramilitares por crímenes de lesa humanidad, Bernabéu consideró que fue un recurso jurídico interesante cuando se promulgó, pero lamentó que no haya producido los resultados esperados. La jurista, una de las trece personalidades más influyentes en España y Latinoamérica en el año 2013, enfatizó la importancia de prestar atención a las víctimas e involucrarlas en la búsqueda de justicia. “Personalmente no creo que la justicia deba ser sólo punitiva, pero en Latinoamérica no he conocido a mucha gente que piense de esa manera. Usualmente las víctimas entienden por justicia llevar el caso ante los tribunales y yo trabajo de ese modo porque ellas me lo piden”, dijo. La abogada aseguró haber aprendido mucho de quienes luchan porque se haga justicia e hizo especial mención al Informe de la Comisión de la Verdad de El Salvador, del que rescató que sea el único en el que se menciona los nombres de los victimarios. Tristemente, señaló Garzón, al día siguiente de su publicación se aprobó la Ley de Amnistía que trajo impunidad. EEUU y violaciones a los derechos humanos La existencia de un centro como el CJA, para el que trabaja desde hace trece años, produce esperanza incluso en un país como los Estados Unidos, cuyas principales características no son precisamente el respeto a los derechos humanos ni el compromiso con la comunidad internacional, destacó Almudena Bernabéu. Sin embargo, y de manera paradójica, Estados Unidos continúa siendo el país de residencia de muchos perpetradores, especialmente, de Centroamérica. Eso tiene que ver, según ella, con los intereses económicos y políticos de ese país en mantener dictaduras y regímenes de terror en la región, lo que lo convierte en cómplice de graves violaciones a los derechos humanos. “Durante los años ochenta se negaron masivamente muchas solicitudes de asilo político a los perseguidos, pero les fueron concedidas a muchos exmilitares salvadoreños. Actualmente esa situación ha cambiado y se muestra más desinterés que complicidad, subrayó. Para Bernabéu políticas como el Plan Colombia son herederas de ese pensamiento unilateral de Estados Unidos, que pone sus intereses como prioridad. A su juicio, eso está estrechamente relacionado con las extradiciones de los líderes paramilitares. “Ahí quedó claro que la prioridad no son los derechos humanos, aunque obviamente hay que juzgar el tráfico ilegal de drogas”, dijo. La mayoría de casos llegan al CJA a través de las víctimas. Los abogados deben establecer tanto la culpa del imputado como el nivel de daño que ha sufrido la víctima. Los medios de comunicación, que siguen de cerca estos casos, juegan un papel clave en que los hechos se conozcan. Justicia Universal: ¿En vías de extinción? Justamente los medios de comunicación han informado sobre los límites impuestos a la justicia universal en países como España. El caso de ese país, de donde son originarios Bernabéu y Baltasar Garzón, director de Hablemos de Paz y Derechos Humanos de Canal Capital, es especialmente ilustrativo. “En este momento, el vapuleo de la justicia universal en España es devastador”. Hay mucha información negativa y malintencionada con la que se insinúa que se estaba cargando demasiado a la justicia española, cuando la verdad es que los casos tramitados eran muy pocos y los costos por asumirlos lo eran igualmente”, aseveró la abogada valenciana. Cuando ofició como juez de la Audiencia Nacional de España, Baltasar Garzón emitió la orden de captura contra el exdictador chileno Augusto Pinochet. En Guatemala nadie olvida que fue el juez Santiago Pedraz quien llevó a Ríos Montt a los tribunales. “La labor que se ha hecho en materia de Justicia Universal es muy buena, pero la vamos a perder”, manifestó Bernabéu con preocupación. La jurista comentó que en el CJA ha sido creado recientemente un programa de apoyo a los tribunales nacionales de países que pasan por un momento de transición a la democracia o al postconflicto. Expresó su complacencia porque sabe que puede ser muy útil en esa tarea, pues ha trabajado allí y conoce a los abogados que llevan los casos. En referencia a Colombia, Garzón afirmó que la Justicia Universal no es enemiga de un proceso de paz, afirmación con la cual Bernabéu expresó estar de acuerdo. “Siempre ha habido una interpretación muy sesgada que habla de la justicia universal como si implicara pérdida de soberanía. La vocación de quienes hacemos este trabajo nunca ha sido otra que la de llevar a cabo estos procesos en casa. Creo que hay que tener eso muy en cuenta”, enfatizó Bernabéu. “Las víctimas nunca pierden la capacidad de resistir, ni de perseverar, y siempre va a haber creatividad, ingenio y talento para buscar otro modo de demandar justicia”, concluyó la jurista valenciana. Fuente: Hablemos de paz y derechos humanos