miércoles, 18 de junio de 2014
La opinión de...Salvador Ferrer i Paradeda (¿Estamos enfermos los mexicanos?)
¿Estamos enfermos los mexicanos?
Salvador Ferrer i Paradeda.
Después de ver las diferentes cadenas de televisión y sentirme totalmente despojado de mi inocencia, no me queda otra cosa que preguntarme qué tal andamos de salud los mexicanos. ¡¡¡Impresionante, sorprendente, alucinante, de imperiosa ansiedad y lleno de sorpresas!!!.... así me deja el contemplar la caja boba.
Gastritis, uñas negras, almorranas, dolores de cabeza, ansiedad, piel seca, falta de vitaminas, pie de atleta, verrugas, gripe, caries, diabetes, sida, asma, anorexia, obesidad, diabetes, infecciones oculares, arrugas en la cara, vejez prematura, reuma, acné, tos… así podríamos seguir con un amplio diccionario médico. Eso es lo que vemos, anuncios en las horas de más audiencia, significado de que estamos “jodidos” o de plano quieren jodernos para hacer del consumo diario un negocio redondo de los laboratorios (dicho de sea de paso, socios de las cadenas de televisión). Luego a continuación, en letras bien grandes advierten … ¡NO SE AUTOMEDIQUE! .
Es como tildarnos de “pendejos”, en pocas palabras, somos consumidores de lo propio y lo ajeno, eso sí, vamos por buen camino. La fuerza cansina de la repetición me lleva a pensar muy seriamente si estamos ante una “pandemia” de la cual no podremos librarnos y nos llevará a “una muerte” por habituarnos a consumos diarios con tal de complacer a los laboratorios que proclaman fidelidad a la audiencia. ¡Ah! me olvidaba, nuestra bien ponderada Laura Bouzzo, tan amiga del pueblo, nos refriega diariamente con las divinidades de sus productos preferidos (de los cuales obtiene pingues beneficios al ser distribuidora). Amiga… amiga, siempre tan condescendiente con tu público ¿verdad?.
En fin, seguiremos observando atentamente las divinidades que la medicina nos aporta ante los machacones mensajes y de paso… seguiremos enfermando de lo que está por descubrir. Todo sea con el fin de mantener a una serie de “gandallas” que se lucran con nuestra salud y hacen de ella lo que les viene en gana.
Mejor haríamos en apagar la “caja tonta” (esperaremos a que acaben los mundiales) y dedicarnos a ser un poco más… inteligentes y estudiosos, porque lo que sí nos destaca es nuestra falta de aprendizaje y ganas de seguir aprendiendo.
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