Clavadista brasileña casi expulsada por tener relaciones sexuales en la Villa Olímpica

El incidente tuvo lugar una noche antes de su presentación en la competición de clavados sincronizados de 10 metros.

La deportista Ingrid de Oliveira, que compite por Brasil en salto de trampolín, tanto en categoría individual como sincronizada, casi ha sido expulsada de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, por mantener relaciones sexuales con el compatriota Pedro Goncalves, en la Villa Olímpica. Una noche antes de que iniciara su competencia, Ingrid y su compañera de competencia, mantuvieron una fuerte discusión, después de que Ingrid pidiera a Giovanna que la dejara a solas por un tiempo en la habitación que compartían, ya que iba a recibir a un hombre, debido a que su compañera se negó, Ingrid se escapó para pasar un momento íntimo con el remero brasileño Pedro Goncalves, lo que ocasionó que perdieran la concentración y quedaran en el último lugar. La situación causó un gran malestar a Giovanna, ya que quería descansar para el reto que les esperaba al día siguiente. Al considerar el comportamiento de Ingrid como poco profesional, su compañera informó del incidente a los jefes de la misión brasileña.

Luego de competir en varios torneos, Ingrid De Oliveira y Giovanna Pedrosa se hicieron grandes amigas, pero su amistad se fue desgastando hasta el límite de hablarse sólo por profesionalidad. Tras hacerse públicos los hechos, la clavadista ha recibido muestras de apoyo de sus seguidores en las redes sociales. "No se preocupe y no pierda tiempo con lo que otros dicen o no dicen. Es su vida y su resultado depende solo de usted y de nadie más. No pierda tiempo con explicaciones y justificaciones, nadie vive lo que usted vive", le escribió un usuario. El Comité Olímpico Brasileño (COB) discutió el error disciplinario de la deportista, pero, finalmente, decidió no tomar medidas punitivas.