PGR destruyó 26 millones de cigarros ilegales

En México, en el marco de la campaña “Juntos contra la Ilegalidad”, la Procuraduría General de la República (PGR), a través de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), llevó a cabo la destrucción de 26.7 millones de cigarrillos ilegales asegurados de diversa marcas y, principalmente, de procedencia china. Derivado de los trabajos de investigación realizados por el Ministerio Público de la Federación, en coordinación con la Comisión Federal para Prevención contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), el Servicio de Administración Tributaria (SAT), la Policía Federal Ministerial y la Coordinación General de Servicios Periciales, el pasado mes de julio, se logró este aseguramiento sin precedente de cigarrillos ilegales. Además, el Ministerio Público de la Federación llevó ante los tribunales a los integrantes de esta organización criminal dedicada a la introducción ilegal de tabaco que no cumple con las normas sanitarias ni con los procedimientos de importación, aduaneros y fiscales. El Titular de la Unidad Especializada en Investigación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita y de Falsificación o Alteración de Moneda (UEIORPIFAM) de la SEIDO, Rafael Mateos Poumián, afirmó que los cigarrillos destruidos habrían representado cuantiosos ingresos para financiar otras actividades delictivas. “Y, por supuesto, afectar de manera inmediata la salud de los ciudadanos y la Hacienda del Gobierno de la República. Las investigaciones continúan y seguiremos afectando la economía del crimen”, dijo. Por su parte, el Presidente de la Comisión de Comercio Interior y Mejora Regulatoria de la CONCAMIN, Raúl Picard del Prado advirtió que esta competencia desleal afecta el mercado interno y a toda la cadena productiva del país. El 17 por ciento de los cigarros consumidos en México son de procedencia ilícita y que ha afectado al fisco, estos cigarros, representan una pérdida de 6 mil millones de pesos al año. Según el Grupo de Acción Financiera Contra el Lavado de Dinero (GAFI), la venta de cigarros ilegales es una de las formas más utilizadas para el financiamiento del crimen organizado, el terrorismo y el lavado de dinero. Una fuente de financiamiento para las organizaciones delictivas que, sin duda, pone en riesgo la salud pública y la seguridad nacional.