En el estado de Morelos, para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Instituto de la Mujer de la localidad realizó un mural con las manos de funcionarios locales.
La presidenta del DIF estatal, Elena Cepeda, invitó a plasmar sus manos a los hombres en este caso: “que nunca han golpeado a una mujer, que nunca hallan abusado de una mujer, a menos que pidan una disculpa pública. Si piden una disculpa pública entonces pueden estar con nosotros en contra de la violencia hacia las mujeres”.
Elena Cepeda fue la primera en plasmar su mano, se encontraba también el alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, quien se retiró ante la condición que impuso la presidenta del DIF.
De esta manera, Teresa Domínguez, directora del Instituto de la Mujer de Morelos, desconoció la razón por la que Cuauhtémoc Blanco se salió del salón. “Le invitamos a que se sumara a la estrategia de plasmar la mano izquierda de color naranja y obviamente hacer un compromiso con las mujeres del municipio. No sé por qué hubo ahí alguna inquietud de su parte y se retiró”.
Posteriormente, el Ayuntamiento de Cuernacava explicó que el alcalde salió del lugar “por una falta de respeto muy marcada” en el protocolo del evento y por la “postura de protagonismo” de autoridades estatales.
Sin embargo se dio a conocer que en noviembre de 1998, Marisela Santoyo, entonces esposa de Cuauhtémoc Blanco, interpuso una demanda en su contra por lesiones.
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