Edecán declara que le ofrecieron dinero por favores sexuales a Cuauhtémoc Gutiérrez

Héctor Cruz López | La procuraduría capitalina confirmó ayer que el jueves pasado se presentó a denunciar una joven mujer, identificada como “Sofía”, por el delito de acoso sexual contra el ex líder del PRI-DF, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre. Sin embargo, la declaración de la presunta víctima fue tomada como “testimonial” y se anexó a la averiguación previa iniciada por la denuncia del PRD-DF.

El contenido de la denuncia de “Sofía” fue dado a conocer este lunes en un noticiero radiofónico, donde la mujer detalló que en mayo de 2009 leyó un anuncio clasificado en el periódico en el que solicitaban edecanes para “trabajar en el gobierno”. De acuerdo con la información, la víctima acusó a Priscila González Martínez como la persona que le ofreció entre 30 y 40 mil pesos mensuales por acompañar al político a donde él quisiera y tener sexo con él. En la denuncia, la joven señala que trabajó 15 días en el PRI-DF, que es originaria del DF, que estudia nutrición y que se dedica, ocasionalmente, al modelaje y a trabajar como edecán. Sin embargo, Iván Villarreal, abogado de Gutiérrez de la Torre, aceptó que conoció de la denuncia el pasado sábado, pero del contenido se enteró la mañana de este lunes, durante el noticiario, por lo que en las próximas horas acudirá a la PGJDF para conocer el contenido de la denuncia. Aunque adelantó que exigirá sea desechada dicha demanda, porque en el tiempo que refiere la supuesta víctima, su cliente era secretario del Trabajo de la Unión de Pepenadores del DF y, más aún, tampoco tiene casa en Churubusco, como refirió la denunciante. “Sofía” refiere que como necesitaba el trabajo, acudió al siguiente día a una agencia en la colonia Condesa, donde la atendió una mujer de nombre Priscila González Martínez, quien le explicó que el trabajo era para una campaña del PRI en el DF con un pago quincenal. Después, refiere que fue llevada a unas oficinas del PRI capitalino y que al llegar una mujer de nombre Sandra Méndez Hernández, le dio un pago a Priscila, quien la dejó en el lugar. Sandra se presentó como asistente de Cuauhtémoc Gutiérrez, explicándoles el horario de trabajo, con un pago de entre cuatro y seis mil pesos quincenales, y que el uniforme consistía en usar siempre falda o vestido cortos.