Pemex, enfrenta demandas por 21.7 mil mdp, ¿se volverán públicas?

Raúl Linares.

Con un fondo de apenas 17 mil millones de pesos para enfrentar procesos legales, Petróleos Mexicanos (Pemex) se enfrenta a nueve juicios de arbitraje por un monto que alcanza los 21 mil 725 millones de pesos. Los procesos corresponden a los ámbitos civil, fiscal, penal, agrario, administrativo, ambiental, laboral, mercantil, de amparo y de arbitraje. Esto quiere decir que si la empresa paraestatal, que está en vías de convertirse en una empresa descentralizada del Estado, ganó durante el año 2013, 813.6 mil millones, debe poco más de una décima de sus ingresos. Según datos revelados por el periódico Milenio, “la petrolera dio cuenta en su reporte anual presentado ante la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) que dispone de una provisión que asciende a 17 mil 624 millones de pesos para cubrir eventuales fallos en su contra”, es decir, una cantidad menor a la que exigen las autoridades civiles para saldar daños. Dos de ellas, incluso, se encuentran en la jurisdicción internacional. Un ejemplo de este tipo de demandas es, por ejemplo, la que debe a Conproca SA de CV, empresa que prestó servicios para la construcción de obras en la refinería de Cadereyta, y por incumplimiento, demandó ante la Corte Internacional de Arbitraje en 2001, alrededor de 311 millones de dólares. Otro conflicto es el que se produjo con la empresa Commisa, igual presentado ante la corte Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional en el año 2004, ante el incumplimiento de contrato registrado dentro de la plataforma de perforación de Cantarell. El fallo emitido por un juez del distrito sur de Nueva York, lo obligará a pagar 465 millones de dólares. Otro de los tópicos que están en pendiente, son las deudas por impuestos que la han ahogado en un bajo crecimiento económico y, finalmente, una de las excusas por las que supuestamente el Estado mexicano ha prescindido de mantener su explotación exclusiva. “Tanto Pemex Exploración y Producción como Pemex Refinación litigan en el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa juicios contenciosos por créditos fiscales con un monto de 4 mil 575.2 millones y mil 553.4 millones de pesos, respectivamente. Ambos son contra el SAT, derivados de la revisión de los estados financieros de 2006 por las contribuciones federales, el IVA y el Impuesto a los Rendimientos Petroleros, así como el Derecho Ordinario Sobre Hidrocarburos”. *** Lo que todavía no queda claro, en medio de un debate por aprobar las reformas energéticas que abrirán a la industria petrolera a la iniciativa privada, es cómo esas deudas serán absorbidas por esa maltrecha propiedad estatal. Una parte aboga por socializar las pérdidas y trasladarlas a la deuda pública, en lo que el régimen se ajusta, como en el caso de sus pasivos laborales. La otra aboga por elevar la carga fiscal que le restará competencia, ahora que será posible la intervención extranjera. El pasado de junio, como referenció Revolución TRESPUNTOCERO, se presentó el “Reporte de resultados de Petróleos Mexicanos, Organismos Subsidiarios y Compañías Subsidiarias” al 30 de junio de 2014, donde se informó que la empresa de todos los mexicanos, perdió 52 mil 988 millones de pesos, tan sólo en el segundo trimestre del año. A pesar de estos números, para el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell y para Luis Videgaray, secretario de Hacienda y Crédito Público esto no es un problema pues aseguran que las tarifas del combustible y la electricidad se reducirán en dos años y piensan que con la reforma energética 500 mil empleos en 2018. Cabe recordar, que la “reducción” de precios, si los planes de Videgaray y Codwell salen correctamente, la competencia y la inversión que vendría, sería absorbida por la iniciativa privada bajo las leyes de la oferta y la demanda. No obstante, voces aún incrédulas, como la del gobernador californiano Jerry Brown, han advertido que sin una regulación de “mano dura” a dichas compañías, estas “se los comerán vivos”, dijo el martes pasado. Mientras, ayer, el mismo Videgaray reconoció que, con ley secundaría o sin ella, por ejemplo, los pasivos laborales de Pemex ya figuran de por sí como deuda pública.Fuente;3.0