martes, 5 de agosto de 2014

La opinión de ...Salvador Ferrer i Paradeda (El sexo del inconsciente)

EL SEXO DEL INCONSCIENTE. Salvador Ferrer i Paradeda.
Si la parte puramente fisiológica de la sexualidad funciona, - sin ninguna enfermedad o sin que tenga que estar inhibida por el cerebro -, los reflejos sexuales se manifiestan de manera clínica durante el período del sueño nocturno. Mientras se duerme, además de erecciones o lubricación vaginal, las personas experimentan, a veces, orgasmos. En los hombres se les llama eyaculación nocturna. También se le puede llamar, “solución", pero suena muy feo - tiene un significado ambiental nocivo - y nos hace retroceder a épocas en que era considerado como un pecado grave por la iglesia... Lo cierto es que se trata de un gran invento de la naturaleza, ya que, a parte de mantener el aparato en funcionamiento, aúnque no se use, proporciona una vía de salida a la tensión sexual que no se haya podido liberar por otros medios. Es decir, que a través de este reflejo biológico, los hombres que hayan podido estar sometidos a una excitación sexual, normal o anormal, conseguirán descargar la tensión fisiológica acumulada, de manera lógica. Por lo que hace a las mujeres, el grupo Kinsey, en el año 1.953 ya se expresaban así: "Igual que el hombre, frecuentemente la mujer se despierta a causa de espasmos musculares que siguen a los orgasmos". Generalmente, esto es frecuente en mujeres que obtienen orgasmos por otros conductos. No sería del todo correcto conceptuar estas acciones como un tipo de conducta sexual, pero sí como una forma bien natural de expresión de la sexualidad humana. No obstante, algunas personas - generalmente mujeres, pero también hombres con una educación muy reprimida - se sienten incómodos delante de esos tipos de orgasmos. A veces porque piensan que se han masturbado inadvertidamente, otras veces porque esto les hace considerarse como excesivamente sexuales. Como la mujer que tenía una relación marital satisfactoria, incluso en el aspecto sexual y que durante un mes despertó cuatro o cinco veces después de un orgasmo y pensaba que se estaba volviendo ninfómana... Pero todo es cuestión de tener una información correcta. Lo más probable es que se sigan produciendo reacciones aprensivas como ésta, mientras no se generalice más el conocimiento que la excitación periódica durante el sueño y los orgasmos, son un fenómeno natural. Respecto a los sueños explícitamente sexuales que suelen despertar este reflejo, se dan ¬según Kinsey - en un 70% de las mujeres y en un 100% de los hombres. En ocasiones el contenido de los sueños, puede intimidar, porque, la conducta involuntariamente escenificada por ser mal vivida...., i si se llevara a la práctica !. Pero es preferible no mitificar el significado simbólico, quizás no tienen nada que ver con la sexualidad, ya que los sueños no dejan de ser un rompecabezas donde se mezclan hechos cercanos, lejanos, más intensos, más anecdóticos; una composición de recortes que expresan en primera persona o en otros personajes tales traumas reales como hechos e imágenes intranscendentes... Si bien la mayoría de las personas se dan cuenta que los sueños no tienen porque tener una equivalencia real - y a veces tan sólo simbólica -, otras personas se asustan porque tienen miedo del impulso que este sueño representa. Tal vez, en algunos casos, cuando se repiten con frecuencia sueños perturbadores, se puede sospechar algún trastorno sexual que se podría resolver acudiendo a un terapeuta adecuado y dejar que la propia naturaleza libere la tensión de esta manera tan original

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