Quedan 11 pendientes en la sede del Senado

24 HORAS A más de cuatro años de haberse ocupado la nueva sede del Senado de la República, cuyo costo supera los 3 mil 955 millones de pesos, no se ha logrado concretar la entrega total del inmueble debido a que existen 11 trabajos que, al no cumplir las especificaciones técnicas, están en proceso de controversia.

Fue en diciembre del 2007 cuando la empresa constructora GAMI Ingeniería e Instalaciones S.A. de C.V, inició los trabajos del inmueble ubicado en Reforma e Insurgentes y, a casi ocho de años de distancia, la construcción y equipamiento de la Cámara de Senadores continua en curso, lo que podría aplazar hasta el mes de diciembre próximo su entrega final. Según lo informó en entrevista con 24 HORAS el senador Raúl Aarón Pozos Lanz (PRI), presidente del Comité Técnico del Fideicomiso de Inversión y Administración para Apoyar la Construcción y Equipamiento del nuevo recinto de la Cámara de Senadores, actualmente están bajo proceso de arbitraje 11 aspectos que no satisfacen los estándares solicitados: el sistema de circuito cerrado de televisión; unidades generadoras de agua; tuberías de baja presión; piso de cristal, sistema de automatización y control; sistemas de monitoreo de redes digitales; sistema de alimentación ininterrumpida de energía eléctrica; proyectores para pantalla de votación; armado de mobiliario, pisos de basalto gris y sistema Metasys. Estos trabajos, al estar en proceso de peritaje, no han sido pagados. “Son 11 puntos los que se están definiendo en peritaje, y es lo quedaría pendiente para resolverse y lograr el finiquito, es decir, la entrega al 100% y el pago al 100% de todo lo que se convenga en el arbitraje (…) Nosotros estimamos que antes de que termine este año 2015, debe haberse efectuado el finiquito y con ello se culminará todo este largo y complejo proceso de entrega del Senado de la República. Lo que está planeado, programado y discutido es que sea antes de que termine este año, puede ser en noviembre o diciembre”, declaró. Originalmente, el Senado de la República tendría un costo de mil 699 millones de pesos y sería entregado en noviembre del 2010 (tres años después de iniciada la obra), no obstante debido a las variaciones de contrato y nuevas requerimientos por parte de los senadores, la ejecución de la obra ha superado ya los siete años. Según consta en la documentación relativa a la construcción y equipamiento de la nueva Sede, el Contrato original con la empresa constructora sufrió diversas modificaciones en los últimos años, con proyectos originalmente no contemplados que además de encarecer el proyecto, ampliaron el tiempo de ejecución de los trabajos. Peticiones El Senado ordenó, por ejemplo, la elevación del presidium y del podium central en el Salón de Plenos, a fin de mejorar la perspectiva visual de los Senadores de la Mesa Directiva hacia los asistentes; se solicitó la inclusión de áreas de oficinas para tres Vicepresidencias de la Mesa Directiva; la ampliación de las salas de protocolo de la Mesa Directiva y de la Junta de Coordinación Política; se solicitó adicionar un Salón de Comparecencias; se requirió la construcción y colocación de reja perimetral de seguridad en el inmueble; y se pidió la colocación de un parasol en el domo del salón del Pleno, a fin de atenuar la luz natural y mejorar la visualización de la información en la pantalla del recinto legislativo; además se demandó la complementación de áreas destinadas a servicios para los empleados de cocina en el comisariato. Pagos pendientes Actualmente, el Senado se encuentra en la etapa denominada “Mecanismos de Solución de Controversias”; una vez concluido este proceso, iniciará el último paso antes de recibir en su totalidad la sede, conocido como “elaboración del finiquito”, momento en el cual se determinarán los adeudos a la empresa constructora, que serán liquidados a través del Fideicomiso número 1705 (creado para la ejecución de la obra) mismo que hasta mayo pasado había recibido 4 mil 945 millones de pesos. La empresa constructora GAMI reclama cerca de 600 millones para liquidar la obra, sin embargo, será después del proceso de arbitraje que se declare la cifra final a pagar, la cual se sumaría a los más de 3 mil 955 millones que se han invertido para este propósito. Sobre este particular, el senador Pozos Lanz afirmó que “las cifras del adeudo no son definitivas, ni siquiera sólidas, hay pretensiones pero los datos van moviéndose todos los días. Al final, la tarea del arbitraje es determinar justo eso, para establecer el monto que el Fideicomiso deberá pagar”. Cabe destacar, que de acuerdo con los propios documentos del Senado, considerando la inversión en el inmueble de 3 mil 955 millones de pesos y un valor mensual promedio de renta de 31 millones de pesos, el costo del inmueble se amortizará en 10.5 años, contando a partir de abril de 2011.