Aprueban, en lo general, 1er dictamen

Blanca Estela Botello | LA CRÓNICA.

El senador perredista Miguel Barbosa dijo que “se está hundiendo al país” con esta iniciativa; . El Senado aprobó en los primeros minutos de hoy, en lo general, el primer dictamen de la legislación secundaria en materia energética. El dictamen está integrado por la nueva ley de hidrocarburos y reforma las leyes de Inversión Extranjera, Minera y de Asociaciones Público-Privadas. Hoy, el pleno continuará con la discusión de los artículos reservados en el primer dictamen, sobre el cual la bancada del PRD hizo 445 reservas. En la sesión, que duró más de trece horas, en la que no se respetaron los tiempos establecidos, hubo 109 intervenciones de senadores y, en total, participaron 69 legisladores en la discusión en lo general del dictamen. Momentos antes de comenzar la sesión, el dirigente del sindicato petrolero Carlos Romero Deschamps dijo que con la nueva legislación se espera “lo mejor para México y para los trabajadores, de eso se trata“. Antes de la presentación del documento, el senador petista Manuel Bartlett pidió una moción suspensiva, ya que, aseguró, se desconoce el verdadero impacto social y económico que tendrá la aprobación de la legislación. Y advirtió: “Van a dar al traste al presupuesto nacional”. La moción fue rechazada. Tras la presentación del dictamen por parte del priista David Penchyna, presidente de la Comisión de Energía, se procedió a la lectura de los votos particulares de los perredistas, quienes a lo largo de la sesión pidieron confirmar el quórum ante lo que, dijeron, era un visible ausentismo. Durante el debate los escaños del PRD estuvieron adornados con pequeños carteles donde se leía: “Reforma Energética = Menos dinero, educación, salud” y “Reforma energética = menos prestaciones”, así como de caretas del ex presidente Lázaro Cárdenas, colocadas en botellas de agua y vasos. El ex secretario de Hacienda panista, Ernesto Cordero, enfatizó que el PAN no es lacayo del Imperio ni cobra en ninguna empresa transnacional. “Tampoco venimos a engañar a nadie, no venimos a decir que de milagro y en automático van a bajar las gasolinas, el gas LP, el gas natural y todos los hidrocarburos. Ese no es el objetivo de esta reforma. El objetivo es generar empleo”, dijo Cordero, quien resaltó que los precios de los energéticos, como los precios de cualquier bien y servicio en la economía, dependen de las condiciones de mercado. El perredista Alejandro Encinas señaló que la definición que más se apega a la visión contenida en la legislación secundaria energética es la de Luis XIV, “donde al igual que el Rey Sol, Peña Nieto se asume como el Estado: El Estado soy yo, el gobierno soy yo, el dueño de las empresas del Estado soy yo, quien dispone de la renta petrolera soy yo, quien responde del patrimonio de todos los mexicanos soy yo”. Sin tardanza, el priista Enrique Burgos respondió: “El Presidente no miente. El Presidente actúa con verdad, está comprometido con el interés nacional y se desempeña con una visión de Estado y de futuro. Difiero. Este no es el régimen de Luis XIV. Este es el régimen del Estado Constitucional, Social de Derecho”. El senador priista Gerardo Sánchez, dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), aseguró que hay quien insiste en infundir terror a los propietarios de la tierra, creando historias de despojo y desolación. “Ni maldición, ni despojo. La propuesta de ley es muy clara: en donde se encuentren hidrocarburos, los propietarios podrán asociarse y tendrán beneficios económicos”. Pero refutó Encinas, quien remarcó que la ley traerá el despojo de las tierras del sector social y el despido y pérdida de los derechos laborales de petroleros y electricistas. La panista Sonia Mendoza destacó que en 1938, cuando se efectuó la expropiación petrolera, las condiciones económicas y políticas de México eran otras, pero hoy se vive en un mundo globalizado, “en donde el internet y las telecomunicaciones han acortado distancias y brechas”. Ante esto, el perredista Miguel Barbosa acusó: “Están hundiendo al país y cediendo al chantaje en perjuicio de los intereses de la Nación”. Y refrendó: “Estamos plenamente convencidos de que la decisión del general Lázaro Cárdenas de nacionalizar la industria petrolera en 1938 fue la correcta y nuestra prioridad es que a la brevedad vuelva a ser así”.