miércoles, 13 de agosto de 2014

SAT extiende plazo para que la iglesia rinda declaración por limosnas

Redacción Revolución 3.o
El Sistema de Administración Tributaria (SAT) extendió el plazo, 4 meses más, para que la iglesia católica y los curas rindan declaraciones fiscales por el concepto de limosnas; dicha medida que tenía como fecha límite el 1 de septiembre, fue aplazado hasta enero del próximo año. Algunas asociaciones, entre ellas la arquidiócesis de México, manifestaron que la medida está alejada de la situación de muchas iglesias y que el fisco se mostraba insensible ante su situación, ante lo cual, justificó el plazo para que los miembros, párrocos y jerarcas de la iglesia católica romana, puedan capacitarse en las nuevas implementaciones fiscales. Cabe recordar que el domingo 10 de agosto del 2014, el periódico Reforma dio a conocer la negativa de las autoridades eclesiales para ajustarse a los nuevos márgenes recaudatorios. “Es algo muy complejo, muy pesado llevar las cuentas. Es muy engorroso y, de plano, habrá que tener contador en cada parroquia porque los curas tienen múltiples ocupaciones como para ahora llevar las cuentas (para el gobierno)”, aseguró el Obispo de Celaya, Benjamín Castillo Plascencia, quien además explicó la “complejidad” de las labores eclesiales. En respuesta, el SAT manifestó que les dará el tiempo señalado, además de cursos de capacitación y la ampliación del régimen fiscal del año 2013. “Lo anterior considerando que se trata de asociaciones sin fines de lucro, cuyas actividades no son comerciales ni mercantiles, que han manifestado su firme compromiso de cumplir y que han solicitado un periodo para capacitarse y poder aplicar correctamente las nuevas disposiciones fiscales”, explicó la dependencia. Y, añadió, tratándose de Iglesias ubicadas en localidades con menos de 2 mil 500 habitantes, el cumplimiento será semestral y podrá hacerse por diócesis o similar. *** La nueva política de recaudación hacendaria, aprobada, entonces, en el Pacto por México, ha implementado nuevas políticas como la facturación electrónica, la extensión del pago del 16 por ciento por concepto de IVA en las regiones fronterizas del país, así como la promoción de nuevos impuestos por concepto de alimentos con alto contenido calórico. Después de la aprobación de la reforma, las principales cúpulas empresariales advirtieron de los efectos que la miscelánea fiscal podría tener para las empresas y que esta podría impactar en el cumplimiento de las metas de crecimiento de la economía. A ocho meses de haberse implementado, buena parte de la población mexicana ha sido afectada con los gravámenes, en los que incluso, se pretende incluir a los sectores productivos enclavados en la economía informal. Paradójicamente, el pasado 31 de julio, Revolución TRESPUNTOCERO dio a conocer que entre los años 2007 y 2013, el Sistema de Administración Tributaria (SAT), canceló y condonó más de 253 mil millones de pesos a contribuyentes; sin embargo, de acuerdo a una queja presentada por el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), el organismo encargado de recabar el dinero obtenido por el cobro de impuestos, se ha negado a publicar quiénes han sido los beneficiarios de esa política.

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