Los purépechas las consideraban espíritus de sus muertos, que llegaban para repapalotear entre ellos a partir del mes de noviembre.
En México, millones de mariposas monarca llegan cada año a los bosques que se encuentran en los estados de Michoacán y México, para regocijo de miles de personas que asisten a esta zona para admirarlas.
Diego González Martínez, guía del operador turístico de la Sierra de Chincua, dijo que aproximadamente arribaron cerca de 50 mil personas en el periodo de noviembre 2015 a marzo de 2016, para conocer el santuario que se encuentran en Michoacán en los límites con el Estado de México.
Para que se pueda observar a las mariposas, se debe recorrer un trayecto de cerca de dos kilómetros desde el inicio del santuario, hasta llegar a una altura de 3500 metros sobre el nivel del mar. Los guías hacen reflexionar a los visitantes la importancia de conservar el lugar, ya que las Monarcas viajan más de cuatro mil kilómetros desde Canadá a hasta llegar a la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca, que tiene una superficie de 56 mil 259 hectáreas.
El refugio perfecto para que las mariposas puedan invernar y reproducirse son los árboles de oyamel, pino, encino, sauce entre otros, para después regresar a Canadá. González Martínez, agregó que a partir de este sábado 19 de noviembre, el parque turístico de la Sierra de Chincua, abrirá sus puertas para recibir a los visitantes que quieran apreciar las mariposas, además realizar un recorrido en caballo, acampar, comer platillos típicos y adquirir artesanías de la localidad.
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